Con críticas dirigidas a políticos opositores y al Poder Judicial y palabras de elogio para los candidatos del Frente para la Victoria en las próximas elecciones, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner reinauguró ayer el histórico cine Gaumont, en el centro porteño, con un llamado a “volver a empoderar a los argentinos de sus bienes culturales”. En el acto, CFK anunció la digitalización del Espacio Incaa y la reglamentación de la vieja ley del doblaje.

Junto a la Presidenta estaban la titular del Incaa y candidata a diputada Liliana Mazure; el legislador porteño Juan Cabandié, que encabeza esa lista; el intendente de Lomas de Zamora y primer candidato a diputado en la provincia, Martín Insaurralde, el senador Daniel Filmus, que busca su reelección, y su compañera de fórmula, Paula Español. También había un importante grupo de personalidades de la cultura, como Pablo Echarri, Víctor Laplace, Leticia Brédice, Darío Grandinetti y Horacio Fontova.

CFK recordó que la ley del doblaje sancionada en 1988 –que establece la “obligación de doblaje nacional de todas las series”– no se cumple. E ironizó respecto del comportamiento de algunos jueces: “Debieron haber puesto alguna medida cautelar para hacer cumplir las leyes que benefician a los argentinos, pero parece ser que las cautelares están solamente para impedir que se cumplan las leyes que benefician a los argentinos”, señaló.

La mandataria destacó la “recuperación de la industria, como nunca, en la realización de producciones de manera tan federal”, y remarcó que el logro de “los dos primeros actores argentinos en obtener un Emmy”, Grandinetti y Cristina Banegas, fue mediante una producción financiada por el Estado nacional. “Anunciamos concursos para que se siga produciendo aquí, impulsando esta industria, generadora de muchos puestos de trabajo y mucha exportación”, manifestó Fernández de Kirchner, que recordó además que la Argentina es la cuarta exportadora mundial de producciones audiovisuales.

La Presidenta también trajo a colación algunos números que indican un aumento en la compra de inmuebles en Miami por parte de argentinos, record en venta de autos usados (que relacionó con la movilidad social ascendente) y la marca histórica en la producción de la cosecha de maíz. “Me parece muy bien que estemos contentos por todo esto, pero acordémonos de todavía lo que nos falta hacer para muchísimos argentinos que necesitan del Estado, porque en algunos lados solamente el Estado puede reparar y recuperar falencias”, sostuvo. CFK completó aclarando que quienes no fueron alcanzados por estas políticas de desarrollo con inclusión “no es que no quisieron sino que no pudieron” disfrutar del crecimiento de la Argentina. “No hablo, cuando hablo de la ayuda del Estado, de lo que dicen de los vagos, que los hay en todas partes. Hablo de la gente que no tuvo la oportunidad”, señaló, y remató: “Porque lo de vago siempre es con los pobres, y yo conozco a cada uno, hijos de millonarios que son unos vagos impresionantes y nadie dice nada”.

Por último, destacó a los principales candidatos presentes: Insaurralde (“otro al que, como yo, le tiraron muchas cosas y le pasaron muchas cosas en la vida, pero pudo superarlas”), Cabandié (“que nació en la ESMA y no tiene un solo rencor”) y Filmus (“que fue un ministro de Educación excelente, el que trajo el proyecto de darle a la educación porcentaje fijo de nuestro Producto Bruto”), a quienes les agradeció por acompañarla porque “esto no lo hace solamente una presidenta, lo hace un pueblo con sus dirigentes nacionales, populares y democráticos”.