“El círculo rojo y el círculo negro. No, no es título de ningún policial... Es lo que pasó y lo que algunos (muy pocos, pero muy poderosos) están intentando hacer en Argentina”, aseguró ayer Cristina Fernández de Kirchner desde su cuenta de Twitter. La Presidenta hizo foco en el blanqueo que hizo el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, sobre la existencia de un grupo de poder que trabaja para reemplazar al gobierno nacional.

“Me gustaría que dijera los nombres. Aunque al menos para mí no es necesario. Basta leer diarios, escuchar radio o mirar televisión y conocer a los personajes y tener memoria. Viejos y ‘nuevos políticos’ que fueron parte de la Argentina 2001, 2002, y del ’90 también”, destacó Fernández de Kirchner, pidiendo que Macri identificara a los integrantes de este “círculo rojo” que habían promovido el acuerdo del líder del PRO con el intendente de Tigre, Sergio Massa.

La Presidenta apuntó a “banqueros, dueños de medios, sus loros mediáticos, gurúes económicos, empresarios monopólicos, dirigentes sindicales ‘quemaurnas’” y agregó que también podía incluirse en el listado a “expertos en bloqueos, saqueos y otras yerbas. O hierbas y algo más. Algunos reúnen todos los instrumentos. En fin, nada nuevo bajo el sol, una vez más los intentos destituyentes”.

Cristina Kirchner se encuentra en San Petersburgo, Rusia, para participar de la Cumbre del G-20, pero aprovechó las muchas horas de vuelo para difundir sus observaciones vía Twitter. CFK puso de relieve que “las declaraciones del jefe de Gobierno de la Ciudad en Perfil del domingo, sobre la existencia de un círculo rojo, son más que interesantes. Elegante eufemismo de destitución del Gobierno. Lo identifica como círculo rojo. Debo reconocer el acierto y precisión de la definición”. Y advirtió que “después del círculo rojo siempre viene el círculo negro”, al que definió como la crisis económica y el endeudamiento externo.

A su vez, la Presidenta resaltó que “nunca en los treinta años de democracia hubo un gobierno al que se atacara, difamara e insultara, como el que me tocó encabezar desde el año 2007”.

“El pasado día domingo hubo elecciones en San Carlos de Bariloche, Río Negro. Aunque mucho no se difundió. Y claro, si ganamos casi con el 55 por ciento de los votos en la ciudad más grande y cosmopolita de Patagonia norte”, apuntó, recordando el triunfo de la candidata del PJ María Eugenia Martini y el caudal de votos obtenido por el también kirchnerista Frente Grande. En tal sentido recordó que “al intendente de Bariloche (Omar Goye) se le revocó mandato por su actuación y responsabilidad ¿o participación? en los hechos. Después nos enteramos. Vox populi en Bariloche. Dirigentes sindicales habrían planificado y ayudado en los saqueos”.

Luego, la Presidenta agregó: “Según Clarín, la venta de autos nuevos y usados marca record y la gente viaja al exterior como nunca... por culpa de la inflación”, señaló con ironía y volvió a utilizar el término “balas de tinta, aunque se enojen los de La Nación”. CFK aludía a una nota editorial de ese diario en la que se reivindicó “el golpe de Estado del ’55 contra Perón. No tiene desperdicio. Constituye una verdadera apología de alzamiento contra la Constitución. Edad de piedra. Y voces del presente”. Finalmente, Cristina Fernández destacó que “los intentos de desestabilización nunca han tenido jueces o fiscales independientes. Es que como a algunos personajes no les fue mal jugando con fuego (aunque las cenizas las pagó el país) quieren hacerlo de nuevo”.