El jefe de la Armada, contraalmirante Jorge Godoy, recibió ayer uno a uno a los oficiales de esa fuerza que suscribieron la solicitada en la que se criticó la posible extradición de los militares acusados de cometer violaciones a los derechos humanos y a todos les dijo lo mismo: que incurrieron en una falta y que, por lo tanto, serán castigados. En el Edificio Libertad adelantaron que se les aplicará una sanción “grave”, que les será impuesta por escrito la próxima semana.
La reacción de Godoy apunta a demostrar que el único autorizado para hablar públicamente acerca de la política del sector es el jefe de la Armada y que no tolerará presiones de sus subordinados, entre ellos los marinos que ya no están en actividad.
Los oficiales de la Armada que firmaron la solicitada en contra de la eventual extradición de los violadores de los derechos humanos desfilaron durante toda la tarde por el despacho de Godoy en el Edificio Libertad.
El jefe de esa fuerza los fue recibiendo uno a uno por orden de antigüedad. El último de los marinos díscolos dejó la sede de la Armada pasadas las ocho de la noche.
Godoy no les dio lugar para planteos. Por el contrario, se limitó a informarles que habían incurrido en una falta al suscribir la solicitada en rechazo a la política de derechos humanos establecida por el Gobierno y les adelantó que por eso serán sancionados.
La otra cosa que hizo fue exhortarlos a no reincidir en la misma falta y que en caso de que lleguen a hacerlo serán nuevamente castigados.
Según trascendió en el Edificio Libertad, Godoy les comunicará en los próximos días por escrito el castigo que recibirán. Lo que daban por hecho en la sede de la Armada es que la sanción será “grave”; es decir, superará los seis días de arresto.
Los marinos que firmaron la solicitada en contra de la extradición de los militares acusados de cometer violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura pertenecen a Aunar, una agrupación que no está exclusivamente formada por hombres de la Armada. “Cuando el Gobierno formula, consiente o firma la extradición de ciudadanos argentinos pertenecientes a nuestras Fuerzas Armadas para ser juzgados en el exterior por hechos sucedidos en nuestro país, al mismo tiempo que solicita al Congreso otorgar inmunidad diplomática a soldados estadounidenses que operen en nuestro territorio, muestra una gran incongruencia”, afirmaron en el texto publicado por La Nación.
No se trata de la primera declaración de Aunar en contra de la línea impuesta por Néstor Kirchner. Cuando el santacruceño decidió remover la cúpula de las Fuerzas Armadas, esa entidad lo criticó públicamente y se preguntó si “¿hubo alguna vez 30 mil desaparecidos?”.
La sanción a quienes suscribieron esa solicitada no es la única medida que Godoy decidió tomar para reafirmar su autoridad. El jefe de la Armada también convocó para el próximo lunes a todos los almirantes retirados que viven en Buenos Aires. Godoy dejará claro en esa reunión que no aceptará ninguna clase de presión, sea por vía de declaraciones públicas o de operaciones, en contra de la política del Gobierno.