El diputado del FAP Gerardo Milman todavía no asumió como representante de la tercera minoría en el directorio de la Afsca y ya tuvo su primera polémica. En declaraciones periodísticas luego de ser designado por el Congreso para ocupar un lugar en el órgano de aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, aseguró que la norma que deberá aplicar tiene “deficiencias” que “el Congreso futuro las tiene que ir adecuando”. Además, cuestionó que sólo se refiera a las empresas de medios y no a “los periodistas como profesión”. “Lo que se desprende de los dichos del diputado Milman sería un enorme retroceso para un país que avanza en la democratización de la palabra, y la pluralidad de voces y expresiones”, le salió al cruce el director de la Afsca, Claudio Schifer, en rechazo a una eventual regulación de la tarea periodística.

El diputado del FAP, cuyo mandato termina en diciembre y que no logró renovar la banca en el Congreso nacional, espera ahora el proceso de publicación de sus antecedentes y la apertura del registro de oposición y adhesiones para llegar a conseguir el cargo en el directorio del organismo que preside Sabbatella. Durante meses, acusó al titular de la Afsca de hacer “circo” por llevar personalmente la notificación de la adecuación de oficio al Grupo Clarín, de cometer el delito de “abuso de poder” y de estar “desesperado por convertirse en cartero”, en una actitud “absolutamente inapropiada y grotesca”.

Luego de su designación por la comisión bicameral de seguimiento de la ley de medios, Milman deberá participar de las reuniones que preside Sabbatella todos los lunes, así que bajó el tono de algunas de sus críticas. Sostuvo que no tiene un “encono personal” con él, sino “diferencias de estilo”. En cambio, prefirió enfocar sus cuestionamientos en la aplicación de la ley y también en el texto de la norma, que él mismo deberá controlar y hacer cumplir. “Habla en dos ocasiones de los periodistas, pero sólo en su calidad de empresarios de medios, no como profesión, cuando creo que es un artífice fundamental y central en la Argentina”, sostuvo Milman, despertando críticas de periodistas y dirigentes.

Schifer, director en representación del FpV, sostuvo que si Milman u otro “quiere avanzar contra las garantías y los derechos consagrados por la ley”, se le van a oponer. “No vamos a permitir que nadie avance sobre la libertad de expresión”, afirmó. Según Schifer, “la Argentina que nació el 25 de Mayo de 2003 es una Argentina con más libertad, con más trabajo, con más oportunidades, con más derechos para todos y todas”. El representante del kirchnerismo le reclamó además a Milman que exprese claramente cuál es su compromiso con la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. “Este organismo está creado para hacer cumplir la ley y no me imagino cómo hará para hacer cumplir algo a lo que critica todo el tiempo”, afirmó Schifer y remató: “Si Milman lo desea, puede impulsar modificaciones a la ley o incluso una ley nueva, pero si ingresa a la Afsca tendrá la tarea de colaborar para aplicar la ley que existe”.

Durante su designación, Milman recibió cuestionamientos del PRO y del Frente Renovador, que aspiraban a quedarse con el lugar que hoy le corresponde al FAP como tercera minoría, pero que cuando se haga el recambio legislativo, el 10 de diciembre, quedará por debajo de ambas fuerzas.