El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, se reunió ayer en Casa Rosada con el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, y con la jefa del bloque del Frente para la Victoria en esa cámara, Juliana Di Tullio, con quienes analizó los resultados de las elecciones, la composición que tendrá el cuerpo a partir del recambio legislativo del 10 de diciembre y la fuerza propia con que contará el kirchnerismo para abordar la agenda parlamentaria de los próximos meses. Si bien no trascendió si el Gobierno evalúa el envío de algún proyecto propio al Congreso, el oficialismo busca consensuar en Diputados un temario con la oposición para cerrar el año con una sesión sin contrapuntos. En tanto, el FpV presentará pasado mañana, ante la comisión bicameral, su propuesta para modificar y unificar los códigos Civil y Comercial, que podría llegar al recinto del Senado antes de que culmine el calendario ordinario del Parlamento en 2013.

El encuentro no fue extenso. Abal Medina quería tener de primera mano el balance que sus principales referentes legislativos en la Cámara baja hacen sobre la nueva conformación que tendrá Diputados tras el resultado de las elecciones legislativas y la fuerza con que contará la bancada K, sumando a sus aliados más fieles. “Siendo que el FpV ponía en juego 43 bancas propias, se puede decir que ganamos 5 bancas nuevas”, destacaron los diputados, para ratificar que el oficialismo mantiene la mayoría en la Cámara baja y que, con el aporte de sus aliados, dispone de quórum propio para abrir los futuros debates.

Aunque el motivo de la reunión fue el análisis de la agenda legislativa para los próximos meses, no trascendió si el Ejecutivo prepara el envío de proyectos propios que le permitan mantener la iniciativa política en el Parlamento. Algo que, de todos modos, el Gobierno no acostumbra adelantar.

Igual, el oficialismo avanza en Diputados con la elaboración de un temario acordado con los distintos bloques opositores para realizar la última sesión ordinaria del año, el 27 de noviembre, que también oficiaría de despedida para aquellos legisladores que terminan su mandato y ya no volverán a ocupar una banca tras el recambio del 10 de diciembre.

Las reuniones se sucedieron tras los comicios legislativos, pero la agenda todavía tiene pocos temas comunes que permitan una sesión sin mayores disidencias. Uno de los puntos que incluiría el temario sería la creación del Registro Nacional “No llame”, para resguardar a los usuarios de telefonía de los mensajes publicitarios.

Los otros temas en los que se habría avanzado son los homenajes. Habría dos. Uno, impulsado por el bloque de la UCR, por el 30º aniversario de la recuperación democrática. El otro, a la diputada Margarita Ferrá de Bartol, quien falleció el 11 de octubre pasado tras la caída del helicóptero en el que viajaba en plena campaña electoral junto al gobernador sanjuanino José Luis Gioja, que fue operado dos veces y sigue en estado reservado tras el accidente.

De todas maneras, uno de los temas que concentrará la atención legislativa en lo que queda del año parlamentario será la modificación y la unificación de los códigos Civil y Comercial, cuestión que había quedado relegada en medio del calendario electoral. Este jueves volverá a reunirse la comisión bicameral creada especialmente para abordar el tema y analizar el anteproyecto que elaboraron más de cien juristas bajo la coordinación del presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti. A esa propuesta el Gobierno le introdujo algunas modificaciones antes de enviarla al Congreso. La comisión también recorrió el país en distintas audiencias públicas en las que diferentes actores de la sociedad civil aportaron sugerencias a la iniciativa.

Allí, el Frente para la Victoria presentará –tras limar diferencias hacia adentro de su propio bloque– el predictamen que abrirá la discusión con el resto de las bancadas. “Consideramos que este dictamen incluye propuestas y modificaciones no sólo de nuestro bloque sino también de la oposición”, afirman los legisladores oficialistas que trabajaron en su elaboración y consenso. Pero prefirieron no adelantar el contenido que el mismo tendrá sobre uno de los temas más controvertidos: maternidad subrogada o “alquiler de vientre”.

La idea original del oficialismo es que el debate avance en la Cámara alta con la posibilidad de que lo aborde y lo lleve al recinto antes de que concluya este mes, en el que termina el período de sesiones ordinarias, y le dé media sanción. Sin embargo, desde el radicalismo ya anticiparon que no aceptarán “un tratamiento express” de la unificación de los códigos, mientras preparan contra reloj su propio dictamen. En tanto, el macrismo ya tiene elaborado el suyo.