El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, ubicó en la Asesoría General de Gobierno a Gustavo Ferrari, nada más y nada menos que la mano derecha de Francisco de Narváez. El dirigente y alter ego del Colorado termina su mandato como diputado nacional, luego de la pobre elección que hizo De Narváez. Ahora pasará a integrar el gobierno de Scioli, mientras que el hermano del gobernador, José “Pepe” Scioli, sigue en las filas de De Narváez.

Ferrari es el dirigente de mayor confianza de De Narváez, a quien acompaña desde el comienzo de su incursión en la política. Según comentan quienes los conocen, Ferrari es lo más parecido que De Narváez tiene a un amigo. Nada indica que haya tomado esta decisión sin consultarlo.

Scioli, en tanto, se ocupó de confirmar la noticia con naturalidad. “El diputado nacional Ferrari, que finaliza su mandato, es la persona que va a asumir la responsabilidad de la Asesoría General de Gobierno, que tiene que ver con todo lo que hace al control y la institucionalidad de los actos de gobierno y fiscalizaciones que se llevan adelante”, comunicó el gobernador.

Según señaló Scioli, la decisión de incorporar a Ferrari se da como parte de la “apertura y respeto por los espacios institucionales de los distintos espacios políticos, y respetando el espacio de De Narváez”, con la “profesionalidad y experiencia” del diputado, y en el contexto de un “nuevo clima político” como una demostración más de “madurez y responsabilidad” desde la provincia de Buenos Aires. Afirmó que la incorporación forma parte de una nueva etapa para el oficialismo, con “un marco de diálogo y convivencia democrática. Cumplo con ser un buscador permanente de consensos, y no agregar problemas a los 16 millones de bonaerenses, sino mostrarles resultados concretos”.