El diálogo fue muy “fructífero” y “positivo”. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el gobernador santafesino, Antonio Bonfatti, no dudaron en ponderar con esos términos las características del encuentro que mantuvieron ayer por la mañana en la Casa Rosada. La agenda incluyó el financiamiento externo para obras de infraestructura en la provincia, la economía regional y otras obras como el gasoducto del norte del país y el ferrocarril Belgrano Cargas. El gobernador socialista dijo que también se abordaron “cosas inherentes a dar respuestas y a que el país siga creciendo”, y elogió la “ejecutividad” de Capitanich para “tomar los temas, hacer un repaso muy rápido y dar instrucciones a su equipo para que las respuestas sean inmediatas”. Los “delitos federales”, como el narcotráfico, también estuvieron sobre la mesa de diálogo.

En un breve paso por la sala de periodistas de la Casa de Gobierno, Capitanich y Bonfatti comentaron los alcances del encuentro. “Hemos podido avanzar en una agenda positiva desde el punto de vista de la relación con la provincia de Santa Fe”, definió el jefe de ministros. “Es sumamente positivo para el pueblo de Santa Fe y para el gobierno de Santa Fe tener esta oportunidad de diálogo”, valoró el gobernador.

El jefe de Gabinete mencionó, entre los temas tratados, el vinculado con inversiones chinas para reactivar el tren Belgrano Cargas, que atraviesa 14 provincias, el impulso al gasoducto norte y “aspectos propios de las economías regionales” y contó que se realizó un “análisis muy meticuloso de cuestiones que tienen que ver con delitos, los de alcance federal”.

Aunque Capitanich no se explayó sobre este último tema, el narcotráfico es una de las principales preocupaciones del gobierno santafesino. Su administración está atravesada por la crisis que obligó a descabezar la cúpula de la policía provincial por sus vínculos con el tráfico de drogas, el crecimiento del accionar de estas bandas en su territorio y el estupor por el tiroteo sobre el domicilio particular del propio Bonfatti.

El gobernador tampoco agregó detalles. “Hemos mantenido prácticamente una hora de conversación con el jefe de Gabinete y hemos abordado temas de competencia de la provincia pero, también, cosas inherentes a dar respuestas y a que el país siga creciendo”, resumió Bonfatti.

En cambio, hubo definiciones sobre los puntos económicos de la agenda.

Capitanich afirmó que el gobierno nacional analizará “meticulosamente” los requerimientos de financiamiento externo para obras de infraestructura de la provincia “para propiciar los mecanismos de autorización a los efectos de garantizar la ejecución de las obras”. Destacó como una “muy buena noticia para Santa Fe, Chaco y todo el norte argentino” el contrato firmado ayer para la provisión de material ferroviario destinado al Belgrano Cargas con la compañía de origen chino CMEC por unos 2500 millones de dólares. “Esto generará ingreso de divisas y, paralelamente, la potenciación de la actividad en materia de empleo en las provincias argentinas, propenderá a reducir los costos de transporte y, obviamente, aumentará la competitividad de nuestras economías regionales”, agregó.

Bonfatti marcó que existen “créditos internacionales pendientes de aprobación del gobierno nacional”, aclaró que su provincia “prácticamente no tiene deudas” y “tiene una calificación internacional A positiva”, como para tomarlos. Créditos que, según afirmó el gobernador, serán destinados a obras de “acueductos para agua de consumo, para el desarrollo de la cuenca cañera en el norte de la provincia y para quintuplicar la producción de azúcar y etanol”.

Luego, Capitanich continuó con una frondosa agenda que incluyó otros encuentros con los gobernadores Sergio Urribarri (Entre Ríos), Fabiana Ríos (Tierra del Fuego) y Martín Buzzi (Chubut), en el marco del diálogo con los distintos mandatarios provinciales.