El ex gerente de Telefe Gabriel Bianco declaró ayer ante la Justicia que el yerno de Nicolás Ciccone le pidió acceder al entonces ministro de Economía Amado Boudou para “solucionar una problemática”. Durante el intenso interrogatorio, el testigo reiteró que no poseía una relación con Boudou de semejante confianza ni pertenece “a su círculo íntimo”, que sólo lo conocía de Mar del Plata y que se le ocurrió contactarlo con José María Núñez Carmona. Pero negó saber si existió encuentro alguno entre el yerno de Ciccone, Guillermo Reinwick, a quien sí conoce por ser su vecino, y Boudou o Núñez Carmona. El testimonio de Bianco no permitió confirmar la nueva versión ofrecida en la causa por Ciccone y Reinwick, quienes aseguraron haber mantenido reuniones con Boudou.

Bianco –de 50 años, quien trabajó en Telefe hasta 2010 como director comercial de marketing– mencionó que Reinwick le pidió acceder a los estudios de Telefe junto a Ciccone, en una oportunidad que habría una entrevista al vicepresidente. Dijo que, aunque no lo recordaba “puntualmente, posiblemente haya dado aviso para que ingresaran mientras Boudou daba una entrevista en vivo”. El testigo recordó que “cuando Boudou termina la nota se para y viene hacia la parte de atrás de cámara y saluda a toda la gente que está ahí, entiendo que hubo un saludo general”, y precisó que allí estaban “Nicolás Ciccone, su yerno Guillermo Reinwick y Núñez Carmona”.

El juez federal Ariel Lijo le preguntó si una vez que Boudou dejó el estudio se realizó alguna reunión en las instalaciones de Telefe entre él, Reinwick y Núñez Carmona, a lo que Bianco respondió: “No recuerdo ninguna reunión posterior, no recuerdo si yo le di el teléfono de Núñez o yo lo contacté, tampoco si hubo reuniones entre ellos, sólo recuerdo el pedido y el día del canal”. Al mismo tiempo aclaró que no recordaba porque en esa época su intenso trabajo consistía en tener unas veinte reuniones diarias. Consultado por el magistrado, negó haberse reunido con estas personas en el Hotel Hilton, y dijo no recordar si alguna vez se habían encontrado.

El juez Lijo insistió en saber si ese día le pidieron algún lugar en el canal para que Núñez Carmona, Reinwick y Nicolás Ciccone mantuviesen una reunión. “Yo no lo recuerdo, puede ser, me pueden haber pedido un lugar. No tengo en mi cabeza la situación de la reunión. No sé quién me lo pudo haber pedido. Lo que sí estoy seguro es de que en el momento del estudio es imposible, por la dinámica, tener una reunión. Eso sí lo recuerdo porque los movimientos en el estudio son dinámicos”, declaró Bianco.

Bianco sostuvo que en el barrio cerrado Pacheco Golf Club es “vecino” de Guillermo Reinwick, yerno de Nicolás Ciccone, y que fue esa persona quien “me pide la posibilidad” de que le hiciera “un contacto para acceder” a Boudou por “una situación problemática” que tenía su suegro con la imprenta, por entonces en juicio de quiebra. “Yo le digo que para mí es imposible gestionar esta reunión con el ministro. Y la alternativa posible era que se juntara a tomar un café con Núñez Carmona”, dijo el testigo.

En los últimos días, Reinwick y Ciccone cambiaron su versión de los hechos, y de imputados pasaron a ser considerados testigos: sostuvieron haberse reunido con Núñez Carmona y Boudou, para que la empresa pasara a manos de Alejandro Vandenbroele, a quien su ex mujer definió como el supuesto testaferro del vicepresidente. La Justicia investiga si Boudou incurrió en negociaciones incompatibles con su función al haberle pedido a la AFIP un tratamiento especial para levantar la quiebra de la ex Ciccone, con la que finalmente se quedó The Old Fund, de Vandenbroele. A pesar del modo en que fue difundida ayer, la declaración de Bianco no ratificó la nueva estrategia de los Ciccone, quienes en principio desligaban al vicepresidente del rescate de la empresa.