La ministra de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Carmen María Argibay Molina continúa internada en terapia intensiva. La magistrada ingresó el miércoles en el Instituto Argentino del Diagnóstico, a causa de complicaciones por un enfisema pulmonar.

No es la primera vez que Argibay se encuentra internada en ese instituto a causa de problemas pulmonares, De hecho, durante los últimos meses, ya pasó varias veces por la clínica privada para someterse a estudios por sus problemas de salud. Su cuadro se vio agravado el jueves, porque –según se consignó– la jueza de la Corte presentó también síntomas de divertículos intestinales.

Desde su entorno aseguraron que la internación “fue programada” y no se trató de una urgencia. También afirmaron que, además de atenderse por el problema coyuntural, la jueza decidió someterse a un tratamiento y chequeo intensos, “aprovechando el fin de semana largo”, y que la asistencia de un respirador es parte de la “rutina” que requieren los análisis.

Argibay, de 74 años, fue presa política durante la última dictadura e integra la Corte desde el 3 de febrero de 2005, cuando fue nominada al cargo por el ex presidente Néstor Kirchner. Es la primera mujer del máximo tribunal nombrada por un gobierno constitucional. Helena Highton de Nolasco, su par en la Corte, la segunda.

El Senado aprobó su pliego el 8 de julio de 2004, con 42 votos a favor de oficialistas, entre los que se encontraba la entonces senadora Cristina Fernández de Kirchner, y radicales, contra 17 votos negativos de legisladores peronistas, entre ellos Eduardo Menem, Antonio Cafiero, Celso Jaque y Ramón Saadi.

La magistrada se manifestó en varias oportunidades a favor del derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo, en respaldo a la despenalización del aborto, lo que le valió varias críticas de la Iglesia. Argibay también es reconocida en el ámbito internacional, por formar parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas como jueza del Tribunal Criminal Internacional, encargado de juzgar los crímenes de guerra en la ex Yugoslavia, y por ser miembro fundadora de la Asociación Internacional de Mujeres Juezas.