Vladimir Putin y Cristina Kirchner se reunirán en Buenos Aires luego de la cumbre en Fortaleza.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, calificó a la Argentina como “uno de los socios clave” de Moscú en América latina y anunció que visitará el país el mes que viene. La llegada de Putin a Buenos Aires para mantener una reunión bilateral con su par Cristina Fernández de Kirchner se suma a la ya prevista con el mandatario chino, Xi Jinping, que tendrá lugar con pocos días, o apenas horas, de diferencia. Es que ambos viajarán a esta región para participar de la cumbre del Brics, que tendrá lugar el 14 y 15 de julio en la ciudad brasileña de Fortaleza, a la que la jefa de Estado argentina también está invitada. En tanto, CFK anunció además que esta semana viajará a Asunción para entrevistarse con su par Horacio Cartes y entregarle en nombre del Estado argentino las pertenencias del mariscal Francisco Solano López, principal prócer paraguayo, confiscadas al final de la guerra de la Triple Alianza y hasta ahora nunca devueltas a su país de origen.

“Argentina es uno de nuestros socios clave en América latina”, dijo Putin ayer, durante la presentación de las cartas credenciales de 14 embajadores en Moscú, entre los que estaba el nuevo jefe de la delegación diplomática argentina, Pablo Anselmo Tettamanti. El mandatario ruso adelantó que viajará a Buenos Aires con el objetivo de “debatir detenidamente todos los asuntos actuales de la agenda bilateral e internacional, marcar los proyectos beneficiosos para ambas partes en el ámbito de la energía, incluida la atómica, la industria de maquinaria pesada y la cooperación técnico-militar”.

La visita del jefe del Kremlin al país formará parte de una gira que emprenderá por América del Sur, durante la cual acudirá también a la final del Mundial de Fútbol de Brasil, que se jugará el próximo 13 de julio en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, y los días 14 y 15 de julio, de la cumbre de los Brics, el bloque de potencias emergentes conformado por Brasil, Rusia, India, China y Su-dáfrica, a la que se sumará la Presidenta en calidad de invitada. Tras este encuentro, tanto Putin como el chino Jinping pasarán por Buenos Aires para mantener entrevistas más extensas con CFK, algo que en la Casa Rosada destacan como señal de “la buena relación” con este bloque de creciente importancia en el mapa geopolítico, al que la Argentina podría sumarse en un futuro próximo.

Antes del viaje a Brasil, Fernández de Kirchner visitará la semana que viene Paraguay. Será la primera visita de la mandataria a ese país desde que Cartes asumió el gobierno, en agosto del año pasado, y buscará acercar posiciones entre ambos países, cuya relación se enfrió luego del golpe de Estado institucional que sufrió el ex presidente Fernando Lugo. Según la agenda oficial, la jefa de Estado volará a Asunción el martes y regresará a Buenos Aires esa misma noche o al día siguiente.

Entre las actividades que llevará a cabo la Presidenta figura la devolución oficial de los muebles que pertenecieron a Solano López, máxima autoridad del Paraguay durante la Guerra de la Triple Alianza (contra Argentina, Brasil y Uruguay) entre 1864 y 1870, confiscados por el entonces gobierno de Buenos Aires. Fernández de Kirchner viajará acompañada por el canciller Héctor Timerman y por el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri.

El canciller paraguayo, Eladio Loizaga, destacó la importancia de la visita, que “ratifica el nivel excelente de las relaciones entre ambos países”, ya normalizadas luego de la destitución de Lugo y la llegada al poder del liberal Federico Franco, que derivó en la suspensión de ese país de la Unasur y Mercosur. Con la llegada de Cartes, del Partido Colorado, en elecciones libres, Asunción pudo retomar su lugar en los bloques regionales y normalizar relaciones con sus vecinos.