Uno de los temas centrales del encuentro de legisladores radicales realizado ayer en la ciudad de Córdoba era definir una postura respecto del acuerdo con el PRO de Mauricio Macri, que tanto viene pregonando Elisa Carrió desde la Coalición Cívica. Sin poder alcanzar una posición concreta, la UCR recurrió a una fórmula ambigua: “La UCR, como principal partido de oposición, con mayor cobertura territorial y mayores posibilidades de triunfar en varias provincias y municipios, está caminando en su fortalecimiento para apuntalar el Frente Amplio Unen”, expresaron en el comunicado oficial.

Más allá de la crisis desatada dentro del Frente Amplio Unen, el radicalismo anticipó que su objetivo es ahora “potenciar a todos sus candidatos, tanto a nivel nacional como en los niveles provinciales y municipales”. Según fuentes partidarias, es momento de “recuperar la confianza de la gente”, que declinó en el marco de los chispazos internos, e intentar “engordar lo nuestro”, en alusión a los postulantes propios. Si bien la alianza está integrada por distintos partidos de representación nacional que se pronunciaron en contra del acuerdo con el PRO, los dirigentes territoriales de la UCR con chances de acceder a una gobernación vienen presionando para que el partido acepte competir en una primaria con el jefe de Gobierno porteño.