EL PAíS › LA JUSTICIA RATIFICó EL PROCESAMIENTO DEL JEFE DE GOBIERNO PORTEñO EN LA CAUSA POR EL ESPIONAJE ILEGAL
Sebastián Casanello rechazó el pedido de sobreseimiento del líder PRO. A la espera de resultados de una línea de investigación que apunta a una empresa que habría sido contratada por Franco Macri, el juez consideró prematuro desvincularlo del caso.
› Por Werner Pertot
Mauricio Macri continuará procesado en la causa por el espionaje ilegal. El juez Sebastián Casanello rechazó un pedido de los abogados del jefe de Gobierno para que lo sobreseyera definitivamente. El magistrado consideró que esa decisión era prematura, dado que todavía está esperando los resultados de una línea de investigación que apunta a una empresa de seguridad que habría sido contratada por el padre del líder del PRO, Franco Macri. Casanello recibió la causa que instruyó originalmente Norberto Oyarbide y resolvió enviar a juicio oral a todos los involucrados, excepto a Macri. La Cámara Federal ratificó su decisión, por lo que todo indica que el jefe de Gobierno afrontará su campaña presidencial con el procesamiento encima.
La situación para Macri en la causa es una suerte de limbo: el jefe de Gobierno no irá a juicio oral junto con su ex ministro de Educación Mariano Narodowski ni con el hombre que estuvo frente a la Policía Metropolitana Jorge “Fino” Palacios, ni el resto de los once imputados, pero tampoco cuenta con un sobreseimiento. El juez Casanello decidió excluirlo de la lista que envió a juicio oral, porque consideró que no había suficientes pruebas para tomar esa decisión, pero tampoco para exculparlo. Según Casanello, la prueba hasta ahora se basa en la “posición de vértice dentro de la estructura burocrática de su gobierno” y no hay una “prueba directa” que indique que Macri es el organizador de esa red de escuchas, que funcionaba dentro de su gobierno.
En cambio, el fiscal Jorge Di Lello estimó que la relación entre Macri y Palacios estaba “hartamente probada” en la instrucción de la causa, por lo que apeló la decisión del juez. La Cámara Federal, que originalmente había confirmado el procesamiento de Macri, le dio la razón a Casanello: los jueces Jorge Ballestero, Eduardo Freiler y Eduardo Farah sostuvieron que faltaban medidas de investigación para resolver la situación procesal de Macri y determinar si su padre puede haber estado involucrado. Advirtieron que “pretender demostrar fundadamente” que Macri fue quien solicitó las escuchas sobre su cuñado Néstor Leonardo y sobre el familiar de una víctima de la AMIA Sergio Burstein sería “un proceder arbitrario y antojadizo”, sin concluir la etapa de investigación.
Los abogados defensores de Macri, Ricardo Rozental y Alejandro Pérez Chada, le pidieron, entonces, a Casanello que sobresea definitivamente a su cliente. Se basaron en la declaración del ministro de Justicia, Guillermo Montenegro, quien aseguró bajo testimonio que Macri no tuvo ninguna intervención en la designación de Palacios como jefe de la Policía Metropolitana. Montenegro afirmó que lo eligió él, no Macri.
El juez Casanello rechazó el sobreseimiento “por prematuro”. Lo hizo en un fallo firmado el 29 de diciembre, que se conoció ayer. Les recordó que todavía está esperando un informe de los Estados Unidos sobre la agencia de seguridad Ackerman Group LLC Security & Investigative Consultants, que habría sido contratada por Franco Macri o por su empresa Sideco Americana para investigar a Leonardo, quien era pareja de una hermana de Macri, Sandra, fallecida en junio del año pasado.
“Es menester estar a la espera de la respuesta de las autoridades norteamericanas a los fines de agotar la encuesta en ese sentido y contar con aquella prueba directa”, planteó el magistrado, que piensa esperar a tener todos los elementos para luego tomar una decisión. Casanello también rechazó el planteo de los abogados de Macri, que sostuvieron que se está violando la garantía de plazo razonable, por el tiempo que lleva la causa, iniciada hace ya cinco años. Indicó que la complejidad del caso amerita el tiempo de investigación.
La causa empezó con un llamado a la casa de Sergio Burstein, que le avisó a su hija que El Fino Palacios lo estaba espiando. La investigación descubrió un circuito de escuchas ilegales que utilizaba causas en Misiones para hacer pedidos a la Secretaría de Inteligencia (SI). Ciro James, quien tenía un contrato en el Ministerio de Educación y estaba por entrar a la Metropolitana, era quien retiraba los cassettes de la SI. Tanto James como los ex jueces misioneros –uno de ellos, José Rey, porque el otro falleció– y su secretaria van camino a juicio oral. Junto con Macri, están acusados de formar una asociación ilícita para realizar espionaje ilegal, falsedad ideológica e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
En el camino, Macri se autoinició un juicio político en la Legislatura para que su bloque lo absolviera, pero la oposición porteña constituyó una comisión especial investigadora que probó que el gobierno porteño mintió “sistemáticamente” sobre la causa. El informe final de la mayoría parlamentaria indicó que Macri era el “principal responsable” de lo ocurrido. No obstante, nunca se le inició juicio político dado que el PRO contaba con el número de legisladores para bloquearlo.
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