El secretario de Estado adjunto para Latinoamérica, Roger Noriega, manifestó ayer su “decepción” porque el canciller Rafael Bielsa no se reunió con los disidentes durante su reciente visita a Cuba. El funcionario hizo esas declaraciones en Washington, en una audiencia del Subcomité de Reformas Gubernamentales de la Cámara de Representantes. En el Capitolio, Noriega se lamentó porque el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y Bielsa –quienes visitaron recientemente La Habana- “no se reunieron con líderes de la oposición o hablaron públicamente de la reciente ola de represión del régimen de Castro”.