Este domingo se votará por primera vez con el sistema de la Boleta Unica Electrónica (BUE). El método incluye una urna que imprime con tinta sobre una boleta de papel y también graba la información en un chip. Cuando fue anunciado por Mauricio Macri, fue impugnado porque no había pasado por la Legislatura, pero el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) porteño convalidó la maniobra. A una semana, todos advierten que lo central es la capacitación de los presidentes de mesa, de los fiscales y de la población en general. Los apoderados de ECO señalan que fue insuficiente.

El sistema que se usará es el mismo que se aplicó en las elecciones en Salta y está a cargo de la empresa Magic Software Argentina, que cobrará más de 200 millones de pesos por su implementación. La decisión la tomó Macri a través del decreto 411/14 el 14 de noviembre del año pasado. Esa norma fue impugnada por la UCR, que señaló que el voto electrónico debía pasar por la Legislatura –los macristas sostienen que no es “voto electrónico”, sino “boleta electrónica”–, lo que derivó en una presentación ante el TSJ. El Tribunal falló a favor de Macri y, días más tarde, renunció a la presidencia del TSJ José Osvaldo Casás, que acababa de asumir el cargo.

El método con el que se vota (se puede ver un simulador en eleccio nesciudad.gob.ar/simulador) será el siguiente, según la explicación oficial: el votante recibirá una boleta en blanco y deberá insertarla en una máquina. La pantalla de la máquina le mostrará las opciones para votar. Una vez que se emite el voto, la máquina imprimirá sobre el papel el voto y grabará la información en el chip. Lo que se guardó en el chip se podrá corroborar en un lector de la máquina. Esa información digital servirá para el escrutinio provisorio. El escrutinio definitivo –el único con valor legal– se hará con la información impresa y estará a cargo del TSJ, que es el responsable en esa instancia.

Las distintas partes involucradas plantean que lo central es la capacitación. En el caso de los presidentes de mesa, estuvo a cargo de la jueza electoral María Romilda Servini de Cubría, quien dispuso una serie de jornadas para capacitarlos. “El panorama es normal. Estamos preparando a las autoridades de mesa. La gente concurre a la capacitación. Esperemos que no haya problemas”, sostuvo Servini de Cubría en diálogo con Página/12. “Lo importante es que las autoridades de mesa estén preparadas. Tuvimos una asistencia inmensa. Pusimos incluso otro salón para poner más sillas. Si todo el mundo está capacitado, pensamos que tiene que andar bien, que no tiene que haber problema. Si va alguno que no aprendió nada, lógico que no va a saber manejar nada”, indicó la magistrada.

La jueza electoral explicó que, en caso de ausencia de un ejército de mesa, no se utilizará el sistema habitual para reemplazarlo. “No se puede tomar a nadie de la cola. Hay algunos que están de voluntarios como suplentes”, indicó la magistrada, sobre la suerte de “ejército de reserva” que tendrán para reemplazar a los que eventualmente falten.

Curiosamente, el gobierno porteño no comenzó hasta cerca de la elección la campaña de vía pública sobre la BUE. En cambio, fue la Defensoría del Pueblo porteña la que implementó una prueba piloto en las PASO porteñas, para que los votantes vieran la máquina. La Defensoría porteña capacitó a 170 mil personas en villas y complejos habitacionales y en sindicatos.

Este sábado, en vísperas de la elección, despegará máquinas en todas las escuelas de 10 a 16 horas para todo el que quiera practicar.

Entre los apoderados de los partidos, los más críticos con el sistema son los de Martín Lousteau. “Hoy por hoy, no sabemos cómo va a salir –señaló Mariano Genovesi, apoderado de ECO–. No vimos que haya habido una capacitación de la gente y de los presidente de mesa. Se pasó de cero a cien de la nada.” Genovesi cuestionó también la falta de capacitación de los fiscales: “Hace como dos semanas hicimos la denuncia porque los fiscales del PRO se estaba capacitando y los nuestros no tenían acceso. El TSJ fijó un cronograma. La verdad es que de ese cronograma se cumplió el 30 por ciento”. Sobre las versiones de que la difusión de parte de los códigos de transmisión que se usarán el domingo, Genovesi indicó: “Nosotros hicimos una auditoría del sistema. Mañana (por hoy) vamos a hacer una presentación al tribunal, porque un cable de Télam que cuenta que un sitio web publica las claves de transmisión de datos de las escuelas al centro de cómputos. Si es así, el domingo a la noche puede pasar cualquier cosa. La responsabilidad es del Gobierno porteño”.

La apoderada del Frente para la Victoria, Karina Ravich, detalló que “las máquinas las probamos. Obviamente, son violables. Pero no van a serlo el día de la elección. En principio, creemos que no habría problema. Sí pensamos que va a haber más demora en la votación con los adultos mayores”. Ningún funcionario de la gestión PRO quiso hacer comentarios acerca de las dudas sobre la BUE.