El Partido Obrero (PO) recordó ayer a Mariano Ferreyra, el joven militante de esa organización asesinado hace cinco años por una patota de la Unión Ferroviaria (UF) cuando participaba de una protesta de trabajadores tercerizados del ferrocarril Roca que denunciaban despidos y reclamaban el pase a planta permanente. Ferreyra fue evocado por sus compañeros de militancia del PO y del Frente de Izquierda en un acto en el que se descubrió un mural en la intersección de las calles Perdriel y Luján, en el barrio porteño de Barracas, donde fue asesinado el 20 de octubre de 2010. “El reclamo es que las responsabilidades políticas se investiguen hasta el final”, planteó Marcelo Ramal, legislador por el FIT en la Ciudad y número dos en la lista de candidatos a diputados al Parlasur, quien participó del homenaje junto con Jorge Altamira y Elsa Rodríguez, otra de las militantes que resultaron gravemente herida el mediodía en que Ferreyra fue asesinado. En su recuerdo, un grupo de diputados del Frente para la Victoria acompañados del hermano del joven asesinado y legislador porteño por el kirchnerismo, Pablo Ferreyra, presentó un proyecto de ley para declarar el 20 de octubre Día Nacional de la Lucha contra la Tercerización Laboral. La propuesta fue presentada por los diputados kirchneristas Leonardo Grosso –autor del proyecto–, Andrés Larroque, Héctor Recalde y Edgardo Depetri. Grosso sostuvo que “la lucha de Mariano Ferreyra debe generar conciencia para buscar una solución al problema de la tercerización laboral” mientras que Recalde afirmó que “el mejor homenaje que podemos hacer a Mariano es seguir adelante con los debates para luchar contra la tercerización laboral”.