Aun en modo de baja intensidad a causa del ritmo que imponen las vacaciones estivales, la interna del peronismo bulle de actividad subterránea y no tan subterránea, con las elecciones partidarias en el horizonte cercano y la derrota en las presidenciales como trasfondo. Ayer, el gobernador salteño Juan Manuel Urtubey, a través de uno de sus dirigentes de mayor confianza, fue el primer dirigente en lanzar abiertamente su candidatura para conducir el Partido Justicialista a partir de mayo, cuando venza el mandato de las actuales autoridades. “Estamos trabajando para conformar una corriente del PJ Nacional que se acerque al pensamiento de Juan Manuel Urtubey, porque creemos que es el dirigente adecuado para conducir esta etapa del peronismo”, dijo el diputado Pablo Kosiner, alter ego del mandatario provincial.

En simultáneo, el ex candidato presidencial Daniel Scioli se mostró junto al intendente Martín Insaurralde, uno de los jefes comunales que forman parte del espacio que negoció con el gobierno de María Eugenia Vidal la aprobación del presupuesto provincial. Durante una recorrida por una colonia infantil de verano, Insaurralde convocó a “reconstruir el peronismo a nivel bonaerense y nacional” y nominó a Scioli como candidato a encabezar esta nueva etapa. El ex gobernador todavía duda entre buscar la conducción del PJ nacional en una interna que promete ser complicada o refugiarse en el distrito que encabezó durante ocho año para reconstruir, desde allí, sus aspiraciones políticas de cara a 2017 y 2019.

Hasta hace poco aliados cercanos, hoy Scioli y Urtubey aparecen como rivales directos en la carrera por la conducción partidaria y cada vez más lejanos políticamente. Mientras que el salteño ensaya un acercamiento al Frente Renovador encabezado por Sergio Massa y a los sectores más conservadores del peronismo que se sienten incómodos en el Frente para la Victoria; el bonaerense busca mostrarse como el único capaz de mantener unido a todo el peronismo, pero sin descuidar a los sectores que llegaron de la mano del kirchnerismo y que lo adoptaron en el último tramo de la campaña. Scioli sabe que el caudal de militancia kirchnerista es clave para ganar unas eventuales elecciones internas directas, si es que se llevan a cabo.

“Con espíritu de unidad y responsabilidad, vamos a trabajar juntos para que el peronismo aporte una propuesta superadora y sea garante de los derechos de la gente”, dijo el ex candidato presidencial ayer en Lomas de Zamora. Aunque su plan original, tras la derrota electoral, era volver a asumir la conducción del peronismo bonaerense, varios dirigentes ya le manifestaron su apoyo en una eventual interna nacional. De todas formas, Scioli no dará ese salto si no tiene la seguridad de contar con una red más firme. Específicamente, espera a ver cuál será el camino que tomará la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner de cara a la interna. En su entorno aseguran que no se arriesgará con nada menos que un apoyo explícito.

Por su parte, Urtubey mandó ayer a Kosiner a proclamar su candidatura, en el marco de “una corriente dentro del justicialismo”. Según aseguró el diputado salteño, “hay muchos, muchos dirigentes que comparten el posicionamiento y la proyección de Urtubey porque quieren un recambio generacional”. El sector que encabeza el salteño busca diferenciarse bajando el calibre de las críticas a las políticas del gobierno nacional, fuertemente cuestionadas por Scioli. “Desde el primer momento dijimos que acompañaríamos todas las ideas del gobierno que creamos positivas, pero hay cuestiones que el presidente podría haber resuelto con leyes y no con DNU”, aseguró Kosiner.

El gobernador salteño recibió ayer un elíptico apoyo de uno de sus pares, el pampeano Carlos Verna, un justicialista conservador que fue crítico de los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. En la puerta de la Casa Rosada, adonde acudió para entrevistarse con el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, Verna hizo un guiño a Urtubey: “Yo soy PJ y siempre milité en el PJ La Pampa. Nunca formé parte del kirchnerismo y suscribo la teoría de Julio Bárbaro: El kirchnerismo y el menemismo son enfermedades del peronismo. Ya nos vamos a curar”, aseguró.

El ex gobernador Daniel Scioli se mostró junto al intendente Martín Insaurralde en Lomas de Zamora.