A una semana del comienzo de las clases, todavía no se cerró una sola paritaria docente en todo el país. Tras la marcha atrás del gobierno nacional en la paritaria, en la que postergó sin fecha la presentación oficial de una oferta del 40 por ciento de aumento, los gremios docentes no recibieron ninguna otra comunicación durante todo el fin de semana, según confirmaron los dirigentes sindicales a Página/12. Mientras tanto, el gobierno nacional continuó alentando a las provincias a avanzar en sus propios acuerdos, pese a no contar con el piso que debe establecer el acuerdo nacional. El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, sugirió que Nación ayudará a las provincias a financiar los incrementos salariales, a los que el propio presidente Mauricio Macri les puso un techo del 25 por ciento, lejos del 35 a 40 por ciento que están pidiendo los gremios en buena parte del país. La Ctera convocó a una conferencia de prensa para hoy a las 7 de la mañana, para presentar una denuncia.

“Nada, no tuvimos ni un contacto después del desastre de la semana pasada”, dijo Sonia Alesso, titular de Ctera. La dirigente ayer llamó a los secretarios generales de todas las provincias en una ronda en la que confirmó que no hay ningún acuerdo cerrado a días del comienzo de las clases y en una semana clave para el gremio que el viernes próximo tiene su congreso nacional. A los representantes docentes de la provincia de Buenos Aires y de la Ciudad de Buenos Aires los llamaron el viernes pasado para suspenderles las reuniones que estaban previstas. Hoy habrá negociaciones en La Pampa y en Santa Fe, donde los docentes están pidiendo entre 35 y 40 por ciento de aumento.

El viernes pasado, el ministro de Educación, Esteban Bullrich, levantó la reunión en la que debía firmarse su oferta a los cinco gremios docentes, antes presentada en forma verbal. La oferta acordaba era de un 40 por ciento para el sueldo inicial. Como informó este diario, los dirigentes gremiales señalan que “es responsabilidad exclusiva del gobierno nacional garantizar el inicio del ciclo lectivo”. En ese sentido, advierten que si para el lunes 29 no hay acuerdo no comenzarán las clases, y que el Gobierno violó el principio básico de la paritaria docente, según el cual la paritaria nacional fija el piso para los acuerdos docentes en las provincias, debajo del cual no puede haber ningún salario. Por eso, dicen que el planteo del gobierno, según el cual deben cerrarse primero los acuerdos provinciales, aparece como exactamente opuesto a la ley.

“Hoy no tenemos una sola negociación paritaria provincial que esté cerrada, y la consecuencia directa de lo que están haciendo es que las provincias hoy no saben qué piso van a tener”, dice Alesso. “Hoy no se sabe si el piso nacional es de 6060 pesos que es el básico de un maestro de grado, de jornada simple, mayormente en las provincias del NOA y el NEA, aunque no en todas”. O si el piso a febrero es del 7800 pesos, tal como lo establecía el acuerdo ahora frustrado con Bullrich, que luego elevaría el sueldo a 8500 pesos desde julio. “Hoy en esas provincias no se pueden conocer el piso –agrega la dirigente– con lo cual las negociaciones continuarán frenadas y obstaculizadas. En ese sentido, esto en realidad causa un gran daño no sólo a la paritaria nacional, sino que está desvirtuando las paritarias de todo el país. Y esto es así porque la paritaria nacional docente tiene la particularidad de establecer el piso y cumplir con la Ley de Financiamiento Educativo. Por eso decimos que el 29, si no hay acuerdo, no empiezan las clases.”

Mientras tanto, el ministro Frigerio habló sobre esto en Gualeguaychú, el sábado a la noche, en una conferencia de prensa. “Desde los gobiernos provinciales, que son los responsables de las paritarias, y con la ayuda del gobierno nacional, esperemos poder llegar a un acuerdo”, dijo.

Desde los gremios consideran que es una intromisión al federalismo de las provincias la presión oficial para sostener un techo del 25 por ciento. Pero también señalan que el Gobierno vuelve a vulnerar la ley cuando dice, como lo hizo Macri la semana pasada, que van a mandar a un negociador a las provincias. Desde los gremios afirman que esa figura realmente no existe porque, de acuerdo a la ley, las paritarias se integran con una composición de personas que representan a las partes involucradas y que también está reglamentado por ley.

El año pasado el acuerdo se firmó el 27 de febrero, pero sobre la base de porcentajes que se conocían. Esta es la primera vez que un ministro presenta una propuesta ante los gremios, la anuncia en los medios y después vuelve atrás. “Estamos a mitad de febrero y nos encontramos con una propuesta que imaginamos que antes de presentarla la habían discutido con las áreas de Economía de los gobiernos de las provincias”, señala uno de los voceros de los docentes.