El ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, protagonizó ayer un extraño episodio al ascender a los cuatro policías que detuvieron a José López hace una semana. El argumento fue que los efectivos rechazaron una coima que les ofreció el ex funcionario. Incluso se mencionó una cifra: un millón de dólares. Sin embargo, en la causa judicial que se instruye en General Rodríguez no aparece nada de eso.

Es más, ninguno de los cuatro policías ascendidos ayer declararon en el expediente que les ofrecieron dinero. Tampoco el intento de soborno fue mencionado por la monja que estaba esa noche ni por el vecino-testigo. De haber sido así, la fiscal Alejandra Rodríguez estaba obligada a abrir una causa por cohecho y no sólo no lo hizo sino que en la fiscalía afirman que no tienen ningún elemento que indique que hubo una tentativa de cohecho. Desde un punto de vista judicial, entonces, el ascenso de los efectivos no tiene respaldo en ningún expediente.

El senador bonaerense del Frente Renovador, Jorge D’Onofrio, que estuvo a cargo de la Comisión de Seguridad de esa Cámara, mostró sus dudas sobre todo el procedimiento. “Pedimos los registros de tiempos de respuesta de las patrullas en General Rodríguez. El informe es que tardan entre diez minutos y media hora, de manera que nos pareció raro que aparecieran a los dos minutos. Además, no rescataron a nadie, no se tirotearon con nadie, su vida no corrió peligro. No hay razones para el ascenso”, consideró.

El legislador bonaerense del FpV Fernando “Chino” Navarro consideró que “Ritondo está tratando de armar una campaña propagandística. Habrá que ver si a estos efectivos se les da un reconocimiento, si la tentativa de coima queda probada, pero nada más. Hicieron lo correcto y punto”.