“El director y diagramador de la mayor fuerza de seguridad de la Argentina no cuenta con la idoneidad mínima o rectitud moral para llevar adelante sus funciones”, aseguró ayer la diputada aliada al macrismo, Elisa Carrió, en una carta en la que volvió a apuntarle al jefe de la Policía Bonaerense, Pablo Bressi, y se supone que respaldó a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal.

“Conozco absolutamente tu buena fe y tu voluntad de lucha contra el narcotráfico, sabemos que es a lo que nos comprometimos todas en la provincia de Buenos Aires. Pero sé que vos y yo somos una de las pocas que lo hacemos”, destacó Carrió en el escrito que envió a Vidal después de que la gobernadora pidiera “pruebas” ante la denuncia que ya había realizado la diputada contra Bressi. “O se trata de una brillante mente criminal o es un idiota que carece de capacidad alguna para detectar la presencia de un delito y actuar en consecuencia”, afirmó sobre la actitud del jefe de la bonaerense respecto al narcotrafíco.

“Adonde primeramente apuntó Bressi para mejorar este sistema fue a donde más conocía, el área de narcotráfico”, denunció Carrió en la carta y detalló el supuesto modus operandi del jefe policial al agregar que “trasladó una forma de trabajo que ya venía implementando desde su época como Superintendente de Drogas Ilícitas y que consistía en arreglar con grandes narcos para liberar zonas, a cambio de una suma de dinero estipulada y de que de vez en cuando entregasen un ‘laburo armado’, es decir un lugar con mucha droga, con una persona dentro para responsabilizar”.

Carrió explicó a Vidal que “la relación Bressi (el ex jefe de la bonaerense, Hugo), Matzkin y (el ex ministro de Seguridad e intendente de Ezeiza, Alejandro) Granados son la continuidad de lo que podemos cambiar”.