“En la Argentina costó mucho dejar atrás la violencia política y por eso actos como los que protagonizaron estos grupos el viernes merecen el repudio de todos los partidos políticos”, aseguró ayer el senador justicialista, Miguel Angel Pichetto, aludiendo a los piedrazos que denunció el presidente Mauricio Macri haber recibido en su visita a Mar del Plata. “El derecho a la protesta es esencial al juego democrático y hay motivos para ejercerlo pero no mediante la violencia”, agregó el legislador que dijo hacerlo en calidad de “secretario de Acción Política del Partido Justicialista”. La visita de Macri a Mar del Plata generó una protesta social que fue reprimida por la policía con gases y balas de goma, mientras el Gobierno denunció una agresión con piedras al auto presidencial, que luego fue desmentida por autoridades policiales.