En una causa por presunto contrabando, fueron detenidos dos directores de la Aduana y el empresario paraguayo Oldemar Barreiro Laborda, vinculado al repuesto jefe de la Aduana, Juan José Gómez Centurión, además de al cuñado del ex ministro de Planificación, Julio De Vido. Los funcionarios y el empresario, junto con otro grupo de personas, fueron detenidos en una causa por contrabando instruída por el fuero penal económico. Anoche, varios de los involucrados estaban prófugos. Los nombres y el método coinciden con la denuncia anónima contra Gómez Centurión. En el Gobierno prefirieron no hacer comentarios.

El juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky ordenó detener a Barreiro Laborda (a quien Gómez Centurión frecuentaba como un “informante”, según la versión del repuesto funcionario), al ex director de la Aduana de Buenos Aires, Edgardo Paolucci, quien también había sido mencionado en la denuncia contra Gómez Centurión, y al jefe de fiscalización 2 del organismo, Alberto Giacombo. Además se detuvo a Claudio Minnicelli, cuñado de De Vido y hermano de la ex número dos de la Sigen Alessandra Minniceli. Minnicelli fue, además, asesor del ex secretario de Transporte Ricardo Jaime.

El juez Aguinsky dispuso el allanamiento de las casas de todos los involucrados y de una serie de empresas que estarían involucradas en la maniobra ilegal. En los domicilios de las empresas se encontró documentación utilizada para falsificar la salida de containers. Los detenidos quedaron incomunicados.

La causa por la que se detuvo a los funcionarios y al empresario ligado a Gómez Centurión se inició a raíz de una serie de escuchas en una causa por narcotráfico que investiga el juez Luis Rodríguez. Al detectar conversaciones donde se describían posibles delitos de contrabando, se abrió una nueva causa en el fuero penal económico, el mismo al que el juez Ariel Lijo envió las investigaciones sobre Gómez Centurión. La causa se unió con una previa en la que Aguinsky ya investigaba maniobras similares.

En particular, se concentraron en las escuchas al teléfono de Federico Tiscornia, hermanastro del ex juez Guillermo Tiscornia. Los involucrados a raíz de las conversaciones que se escucharon fueron imputados por sacar ilegalmente del puerto seis contenedores que Gómez Centurión había ordenado inmobilizar por contrabando.

En las conversaciones, Barreiro Laborda utiliza un tono similar al que se pudo escuchar en los audios que sirvieron para remover temporalmente a Gómez Centurión (que, por otra parte, siguió con un cargo de asesor en la AFIP hasta su restitución). Por lo que trascendió, habla abiertamente de mover containters fuera de la Aduana, falsificando sus identificaciones. Gómez Centurión no es mencionado en las escuchas.

El juez Aguinsky consideró que los involucrados constituyeron una asociación ilícita para sacar 30 contenedores bloqueados cobrando, a cambio, un soborno de 70 mil dólares por cada uno. Los seis contenedores que iban a sacar estaban ya cargados en camiones para ir a un depósito de Avellaneda, pero las fuerzas de seguridad frenaron la operación. “Paolucci desempeñó, dentro del entramado de la operatoria a la que se viene haciendo referencia, un rol fundamental, tanto respecto de Barreiro Laborda –quien se refiere a aquél como ‘su jefe’–, como asimismo respecto de los demás eslabones de la cadena”, indicó el juez. “Dada la importancia del cargo público que aquel detentara a la cabeza de la Dirección de la Aduana de Buenos Aires, su aporte fundamental en el caso se evidencia por la jerarquía funcional que le habría permitido ‘alinear’ o ‘poner en caja’ a otros empleados”, advirtió el magistrado.