El informe que Elisa Carrió presentó sobre la “mafia de la pesca” en la Patagonia, donde se destaca el asesinato de un empresario del sector y la participación de estas empresas en el financiamiento de campañas electorales, generó molestia en el Gobierno. Ayer, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, consideró que se está involucrando al presidente Néstor Kirchner y lo calificó de “una verdadera canallada”. La ex legisladora, en tanto, aseguró a Página/12 que “jamás involucramos al titular del Ejecutivo en el crimen, el único que habla de ello es Fernández. Esto le hace mucho daño al Presidente”.
Carrió presentó ayer su informe donde se brindan detalles del asesinato, cometido en enero de 2003 en Chubut, del empresario Raúl Espinoza, dueño de la Pesquera San Isidro, y por cuyo crimen están sospechados como autores intelectuales los directivos de la competidora Conarpesa, los españoles Juan Alvarez Cornejo y Fernando Alvarez Castellano, con sede en la localidad chubutense de Puerto Madryn. Ambos están prófugos y con pedido de captura internacional.
Carrió, quien desvinculó de la causa por el crimen a Kirchner, dijo haber comenzado la investigación en enero de ese año durante un viaje de campaña electoral a Chubut, donde se entrevistó con Espinosa y que en esa oportunidad le entregó “denuncias sobre la actividad de la pesca”. A los pocos días, el empresario fue asesinado. En el informe, presentado ayer durante una conferencia de prensa, se detallan los hechos relacionados al crimen. Si bien no se nombra ningún funcionario de Gobierno, se da cuenta de que estas empresas pesqueras aportaron desde siempre a las campañas electorales de los partidos tradicionales.
De todas formas, durante la conferencia de prensa, la chaqueña anticipó la presentación de una segunda y hasta de una tercera parte del informe. Lo que dará a conocer en diez días estará centrado en el financiamiento de campañas proselitistas. Precisó que existe una vinculación de Conarpesa con Kirchner, ya que la empresa tuvo “participación” en la campaña del entonces gobernador de Santa Cruz.
“La participación está muy clara –indicó la ex candidata presidencial–. Los dueños de Conarpesa recibían a Kirchner, la camiseta de los equipos (de básquet y vóley) de Conarpesa decían ‘Kirchner’, en los actos los colectivos decían ‘Conarpesa-Kirchner’. Esto lo sabe todo Puerto Madryn”, manifestó.
El jefe de los ministros había acusado a Carrió de “buscar elementos mediáticos para enturbiar la imagen” del Presidente. “La gente sabe que Kirchner no mata ni manda a matar, la gente sabe perfectamente bien que está en presencia de un presidente honesto, de un presidente correcto y de un hombre absolutamente honorable”, subrayó en su momento. Sobre el particular, Carrió se limitó a decir que “la verdad es siempre piedra de tropiezos para los mentirosos” y agregó que es probable que su investigación tenga repercusiones similares a las ocurridas en Brasil por el escándalo por presunto financiamiento ilegal del PT, durante la campaña presidencial de Luiz Inácio Lula da Silva.