Tres horas estuvo ayer el canciller Rafael Bielsa en la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados. Durante ese tiempo hizo un repaso de las principales líneas de la política exterior implementada por el gobierno de Néstor Kirchner y también dejó algunas definiciones. Adelantó, entre otras cosas, que la Argentina mantendrá la abstención en la votación sobre los derechos humanos en Cuba y dijo que el Mercosur es una prioridad de la actual administración. Además, anticipó que viajará a Chile para explicarles a las autoridades de ese país las razones que motivaron la restricción en la provisión de gas argentino (ver página 11) y afirmó que este año no habrá ejercicios militares conjuntos con los Estados Unidos. En cuanto a Malvinas, ratificó una vez más el reclamo de soberanía sobre las islas.
La reunión a la que concurrió Bielsa fue la primera que en forma ordinaria mantuvo la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara baja. Esa comisión fue una de las últimas en constituirse en virtud de la puja que por su conducción se desató dentro del PJ y que concluyó con la designación como presidente del duhaldista Jorge Argüello.
Con 40 miembros, la Comisión de Relaciones Exteriores es una de las más numerosas de la Cámara baja; la otra que sobresale por su cantidad de integrantes es la de Presupuesto. La presencia del canciller concitó la atención de los diputados que la integran y de hecho fueron 17 los que se anotaron para hacerle preguntas.
El canciller no acudió solo a la cita. A su lado estuvieron su vice, Jorge Taiana; el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Martín Redrado; el secretario de Culto, Guillermo Olivieri, y el jefe de gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdés.
Bielsa prefirió evitar el monólogo que se le propuso que hiciera para dar comienzo a la reunión y propuso arrancar directamente con las preguntas y el diálogo con los diputados. Fue ante una inquietud del líder de Autodeterminación y Libertad, Luis Zamora, que aseguró que “este año no va a haber ejercicios militares” con los Estados Unidos, pero remarcó que “la discusión es qué Fuerzas Armadas quiere la Argentina”.
También a requerimiento del líder de Autodeterminación y Libertad, Bielsa precisó que la Argentina no se retirará de las negociaciones del ALCA, aunque dejó en claro que “la decisión estratégica es asociarse a lo que es semejante”. Al respecto, el canciller reiteró que el Mercosur es prioritario en la agenda exterior del Gobierno.
“Un voto de condena no contribuiría a mejorar materialmente los derechos humanos”, explicó Bielsa cuando se le consultó sobre la posición que la Argentina adoptará hoy o mañana cuando en la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas se trate la situación de Cuba. En ese sentido, aclaró que “los motivos por los cuales este año mantenemos la abstención no tiene nada que ver con hacerle un favor” al gobierno de Fidel Castro, sino que se basan en “argumentos absolutamente racionales”. Además, remarcó que la misma posición sostendrán “los socios del Mercosur” que integran la comisión, que son Brasil y Paraguay.
El tema de la restricción de la exportación de gas a Chile como producto de la crisis energética ocupó un buen tramo de la reunión y ante la preocupación de los diputados Bielsa adelantó su decisión de viajar a ese país para explicarles a sus autoridades los motivos que llevaron a la Argentina a tomar esa decisión, así como su intención de tratar el asunto “como socios”. Voceros de la Cancillería informaron horas más tarde que Bielsa “partirá el domingo por la noche” hacia Santiago de Chile y permanecerá en esa ciudad un par de días. Si bien aún no estaba definido, el canciller podría llegar a reunirse no sólo con su colega chilena, Soledad Alvear, sino también con el presidente de ese país, Ricardo Lagos.
En su paso por Diputados, Bielsa también ratificó el reclamo de soberanía sobre Malvinas. “Podemos esperar 4, 40 o 400 años, pero nuestro reclamo será el mismo”, sostuvo y agregó que si Gran Bretaña hace alguna propuesta por los vuelos desde el continente hacia las islas “se va aanalizar”. También aseguró que la Argentina no suscribirá ningún acuerdo que signifique limitar la incumbencia del Tribunal Penal Internacional y confirmó que el Gobierno “tiene una opinión favorable a la aprobación del tratado” con Australia para la construcción de un reactor nuclear.