La plana mayor del radicalismo, reunida en Mendoza, emitió ayer un documento fijando su posición sobre diferentes temas. Entre otras cuestiones, los radicales se refirieron a la crisis de seguridad. “En el corto plazo el Poder Ejecutivo debe conformar un gabinete multidisciplinario que aborde y ataque la multiplicidad de aristas que contiene el delito”, explicaron.
En el encuentro estuvieron, además del titular del partido, Angel Rozas, el gobernador de Mendoza, Julio Cobos; el de Chaco, Roy Nikisch; de Corrientes, Ricardo Colombi; el presidente del bloque de diputados, Horacio Pernasetti, y el diputado Roberto Iglesias.
“La situación de la inseguridad, cuyo origen se remonta al Estado desertor de políticas públicas en los últimos años y la corrupción en los organismos de control del delito ha llevado al límite la sensación de un pueblo que sufre y requiere de medidas en el corto, mediano y largo plazo, más allá de reformas al Código Penal”, explicaron los radicales.
Para ellos, la clave pasa por atacar “desde la pobreza, como generadora de marginalidad, hasta la educación, el trabajo, la justicia y la seguridad”. Los radicales propusieron otras medidas. “Que los municipios funcionen como intermediarios del ciudadano en la denuncia de un delito. Para aquellos delitos que por su gravedad y su carácter interjurisdiccional debe el Consejo de Seguridad Nacional establecer políticas de coordinación entre la Nación y las provincias que logren reales avances en la materia.”
Pero los radicales no fueron los únicos en hablar del tema. El presidente del bloque de diputados socialistas, Jorge Rivas, señaló ayer que el plan de seguridad que anunciará el Gobierno en los próximos días debe incluir medidas de fondo. “Es necesaria una reforma de las fuerzas de seguridad y la destrucción de las mafias corporativas, pero sólo será eficiente si se apoya sobre cambios de otro orden, que pongan remedio a la más injusta distribución de la riqueza de la historia de este país”, aseguró Rivas.