EL PAíS
› UN ACUERDO ENTRE JUEZ Y LA UCR GANO LA INTENDENCIA
Traspié de De la Sota en Río Cuarto
El radical Benigno Rins se impuso sobre el peronista Alberto Cantero y consiguió la intendencia de la segunda ciudad cordobesa.
Por Camilo Ratti
Desde Córdoba
La apretada victoria (poco más de dos puntos) de Benigno Rins el domingo en Río Cuarto sobre el peronista Alberto Cantero plantea un nuevo escenario en la política provincial: significó una durísima e inesperada derrota para José Manuel de la Sota, quien apostó como ningún otro gobernador por esta ciudad, fue un triunfo para Luis Juez, que se la jugó en una alianza riesgosa con el candidato radical, y puede leerse como una luz de esperanza para la UCR, que respira sustentada en algunas intendencias importantes, la única cuota de poder territorial que conserva el centenario partido.
La elección del domingo en Río Cuarto trascendió sus efectos regionales, y terminó por dibujar la geografía política cordobesa, que a su vez tiene consecuencias nacionales. Ahora la torta se reparte entre tres protagonistas: Unión por Córdoba, que en la figura de José Manuel de la Sota ostenta el poder central; Luis Juez, quien con esta elección desembarca en el plano territorial (su próximo objetivo de cara al 2007), y la UCR, que logra conservar una pequeña cuota de poder a través de algunas intendencias importantes.
También el resultado generaba alguna expectativa nacional, ya que Cantero, quien tiene buena relación con Kirchner, fue apadrinado por algunos hombres del gabinete, como el ministro de Planificación Julio De Vido, mientras que, por el otro lado, Rins llegaba en alianza con Juez, el principal socio del Presidente en esta provincia.
Con este panorama, la victoria de la fórmula radical-juecista (coyuntural según ambos partidos) dejó muy mal parado a De la Sota, que con esta derrota perdió la ciudad a la que más recursos –políticos y económicos– ofreció en los cinco años que lleva al frente de la Casa de las Tejas. Declarada subcapital y capital de Córdoba una vez al mes, Río Cuarto recibió de las arcas provinciales casi 140 millones de pesos para obra pública. Además, El Gallego viajó más de 60 veces a esta ciudad del sur en lo que lleva como gobernador, y se trasladó con todo su gabinete en la última semana para “apuntalar” a su candidato.
“Cantero es un buen administrador, una persona muy honesta, pero no un buen militante”, murmuraban en el oficialismo. Traducido: no supo vender todo lo que su jefe le regaló en cuatro años de gestión. El jefe (De la Sota) le puso el pecho al resultado, y en clave futbolera señaló: “Nosotros somos como Boca, que aunque pierda algunos partidos, siempre se lleva la copa más importante. Esa copa va a ser otro gobierno al frente de la provincia”, dijo sonriente a los periodistas luego de inaugurar un barrio en las afueras de la ciudad de Córdoba. Entre los vencedores, Juez rebosaba de felicidad: “fue una experiencia muy importante”, le dijo a Página/12, pero advirtió que “esto no fue un triunfo radical, sino de una propuesta transversal de la cual participamos varios sectores, y que sirvió para demostrar una vez más qué tipo de construcciones políticas elige la gente, que ya no se engaña con Juan Polenta o José Colchón”, en alusión a la política delasotista.
En la misma línea, Rins, que con muy buena imagen entre los riocuartenses tuvo mucho que ver en el triunfo del domingo, agregó: “No he ganado yo, ha ganado un proyecto político”. Habrá que ver.