EL PAíS
› COSSIO ACUSO AL EX CONTADOR
A favor de María Julia
El ex titular de la DGI, Ricardo Cossio, complicó al ex contador de María Julia Alsogaray que está en pleno juicio oral porque ella lo acusó de quedarse con la plata que le daba para pagar sus impuestos. Según el testimonio que dio Cossio en la audiencia de ayer ante el Tribunal Oral 1, Ernesto Furlone, el hombre que llevaba las cuentas de la ex funcionaria, “figuraba en una base de datos de la DGI con pagos y facturas apócrifas”.
María Julia culpó a Furlone a raíz de una investigación que le había iniciado a ella la DGI en 1993 por una deuda impositiva. Según la ex funcionaria el contador se había quedado con 320 mil pesos suyos con los que debía pagar el impuesto a las ganancias. El hombre llegó a juicio oral procesado por estafa y el juicio empezó el jueves último.
La declaración de Cossio fue un favor a María Julia y una respuesta a Furlone, quien al declarar el primer día de audiencias acusó a ambos de haber armado un complot en su contra. El ex titular del organismo tributario contraatacó. Habló de la vinculación del contador con documentos supuestamente falsificados que habría registrado la DGI. También aseguró que María Julia se quedó “petrificada” cuando se enteró de las irregularidades en sus declaraciones juradas. Otros testigos que declararon ayer también coincidieron en que Furlone “llevaba personalmente” la contabilidad de María Julia.
La ex secretaria de Recursos Naturales pidió postergación de su testimonio por la muerte de su madre y los jueces Martín Vázquez Acuña, María Cristina Camiña y Ricardo Rongo se la concedieron. Declarará el martes próximo. En las audiencias posteriores se escucharán los alegatos.
Cossio fue uno de los testigos que intentaron declarar a favor de María Julia durante el juicio oral por enriquecimiento ilícito en el que terminó condenada. El ex funcionario reconoció que se pagaban sobresueldos en el menemismo y que él mismo había cobrado en una oportunidad. El tribunal oral que intervino en esa oportunidad, sin embargo, consideró que los sobres en negro eran parte de una maniobra delictiva.