El Gobierno seguía con atención anoche la crisis planteada en San Juan, donde los estatales iniciaron un paro por tiempo indeterminado y tomaron ayer los principales edificios de la administración provincial. Los empleados públicos reclaman el pago de los salarios que les adeudan desde enero y el gobernador Alfredo Avelín llamó un par de veces a la Casa Rosada para pedir algún tipo de ayuda que le permita superar la situación. Al cierre de esta edición, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro del Interior, Rodolfo Gabrielli, estaban reunidos con el ministro de Economía sanjuanino, Ricardo Ortiz, analizando de qué manera podían auxiliar a la provincia para que empezara a pagar los sueldos atrasados.
“La situación en San Juan está realmente complicada. Lo que se está viendo es si se le puede tirar alguna soga a Avelín para que, al menos, pague parte de los salarios que se les debe a los estatales”, explicó a Página/12 un funcionario del Gobierno acerca de la reunión entre Capitanich, Gabrielli y Ortiz. Del encuentro participaban también el subsecretario de Relaciones con las Provincias, Juan Carlos Pezoa, y el senador sanjuanino y presidente del bloque del PJ, José Luis Gioja.
En los dos contactos telefónicos que en busca de auxilio mantuvo con Gabrielli mientras los estatales ocupaban los principales edificios públicos de la provincia, Avelín adelantó que hoy a primera hora se tomará un avión Buenos Aires para solicitar personalmente que lo ayuden a salir adelante. Ortiz viajó ayer mismo con el objetivo de empezar a analizar con los funcionarios nacionales la posibilidad de destrabar el envío de dinero a la provincia.
La clave de la crisis es que los empleados públicos no cobran desde enero. Por esa razón, lanzaron un paro por tiempo indeterminado y tomaron las oficinas públicas. Entre las sedes ocupadas por los trabajadores está el Edificio 9 de Julio, donde funcionan los ministerios de Economía, Salud y Educación de la provincia.
Avelín había anunciado que a fines de esta semana pagaría el 25 por ciento de los haberes adeudados. En ese marco, los docentes levantaron la huelga que mantenían desde el comienzo del ciclo lectivo. Los maestros, sin embargo, no llegaron a dar más de una semana de clase.