Por imposición de los acontecimientos, Carlos Ruckauf recuperó ayer algo del protagonismo que perdió en los últimos años. “Yo soy un hombre que tiene mucha crítica desde el punto de vista de mis ideas y me la banco”, respondió, desafiante, cuando le preguntaron por las declaraciones de Solá. El jueves, tras recibir algunos abucheos en Astilleros Río Santiago, Solá contestó con una crítica a su antecesor: “Yo levanté la provincia, que estaba muerta en el 2002”. Pero la polémica no terminó allí. Ayer, en un acto por el aniversario de la fundación de Chivilcoy, el propio Presidente retomó esos argumentos elogiando la recuperación de la moneda bonaerense. “Fue una vergüenza que el peso prácticamente fuera sustituido por papeles o bonos para poder subsistir”, dijo. Sin embargo, a pesar de las coincidencias de Solá y Kirchner, Ruckauf no se dio por aludido. “No pienso que nadie haya puesto en duda mi honestidad”, aseguró.
Anteayer, en ese mismo acto en Ensenada, Solá dijo que la provincia, en el momento de su asunción, “estaba financieramente muerta”. “No sabíamos si podíamos pagar los sueldos y las cosas más elementales. Estábamos trabajando en base a una moneda que no era moneda, como el Patacón”, dijo. Consultado por esta opinión, Ruckauf aceptó que la situación financiera era muy difícil, pero también deslizó una ironía para el gobernador porque su ministro de Economía, Jorge Sarghini, luego fue nombrado presidente del Banco Provincia por decisión de Solá. “Hay un reconocimiento a todo el esfuerzo que hicimos en ese momento”, replicó.
En su esfuerzo por defender su gestión, Ruckauf defendió el papel del patacón en la crisis de fines de 2001: “Estaba tan bien hecho y tan bien planificado que fue un instrumento que le permitió a la provincia y a otras provincias salir de esa crisis tremenda que produjo el intento forzado de bancarización”, aseguró. Su argumento no logró convencer a Kirchner: en el acto por el aniversario de la fundación de Chivilcoy recordó a “los hombres y mujeres que sufrieron la vergüenza de que prácticamente la moneda nacional tuvo que ser sustituida por papeles o bonos para poder subsistir”. La frase del Presidente, nada inocente, fue interpretada como un guiño cómplice a Solá.
Mientras Solá y Kirchner cuestionaban la emisión de cuasi monedas –lo que implica un cuestionamiento a Ruckauf–, el ex gobernador y ex canciller fue defendido por Elsa Lara de Juzwa, esposa del ex intendente de Berisso y reconocida “chichista” del conurbano. La mujer le reprochó al gobernador que actúe “impulsivamente” y recordó que Solá, antes de ser vicegobernador, fue funcionario del gabinete de Carlos Menem.