Por V. G.

El represor Alfredo Astiz está internado en el Hospital Naval, donde fue sometido a una operación en la que le sacaron un riñón. El “Cuervo” fue trasladado de urgencia hace dos semanas desde su lugar de detención, en la base naval de Zárate. El ex marino está alojado allí a pesar de haber sido destituido en 1998. La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires manifestó su oposición a esta situación y reclamó que Astiz sea enviado a una cárcel común.
El represor más emblemático de la última dictadura está preso en la causa ESMA, en la que el juez Sergio Torres investiga los crímenes cometidos en ese centro clandestino de detención. Pero también fue arrestado en un expediente en el que Francia pidió su extradición por el secuestro de las monjas Alice Domon y Leonie Duquet, que ahora se está investigando en Argentina. En ese caso el fiscal federal de Bahía Blanca, Hugo Omar Cañón, reclamó que Astiz sea enviado a una prisión ordinaria. La Cámara de Diputados de la provincia, a través de un proyecto de declaración, respaldó la solicitud de Cañón “de alojar en establecimientos comunes al represor de la dictadura”.
Astiz fue echado de la Marina después de que la revista 3puntos publicara un reportaje en el que aseguraba que era “el hombre mejor preparado para matar a un político o a un periodista”.
A los diferentes pedidos que le hicieron los organismos de derechos humanos, Torres respondió que mantiene al ex marino en una dependencia de la Armada por cuestiones de seguridad. En los últimos días, sin embargo, el represor fue alojado en el Hospital Naval. Allí le extirparon un riñón.
La semana pasada, Torres viajó a España y Francia para recopilar pruebas para el expediente sobre la ESMA. En Madrid recibió la colaboración del juez Baltasar Garzón, quien puso a su disposición su investigación sobre los militares argentinos. En Francia el magistrado se reunió con los familiares de las religiosas, que se habían presentado en Buenos Aires como querellantes en el proceso. Por el asesinato de Domon y Duquet, Astiz fue condenado en París, en ausencia, a cadena perpetua.
En la causa ESMA, además de Astiz están detenidos otros catorce represores, entre ellos Jorge Eduardo Acosta, Juan Antonio Azic, Carlos Octavio Capdevilla y Adolfo Miguel Donda. Todos permanecen en dependencias de la Armada, pero, salvo Astiz, ninguno fue destituido.