Por Pablo Feldman
Desde Rosario

Carlos Reutemann partió rumbo a Buenos Aires ayer al mediodía y antes de subirse a su coche dijo: “Duhalde tiene que seguir hasta el 2003”. La frase del Lole estuvo precedida de definiciones políticas como “debemos empezar a cumplir con el Fondo porque de los once acuerdos que firmó la Argentina no cumplió ninguno”. De este modo, el gobernador santafesino preparó el terreno para su llegada a la reunión de Olivos de la que participaba al cierre de esta edición. Unas horas antes, Reutemann conversó en privado con Duhalde, quien le expuso las variantes posibles. Fuentes cercanas al santafesino confiaron a Página/12 que “los nombres que circularon fueron los de Alieto Guadagni y Javier González Fraga”. También confirmaron que el Presidente interino reflotó la idea de un “gabinete federal”, por lo que hizo ofrecimientos al cordobés José Manuel De la Sota y al pampeano Rubén Marín.
En cuanto a la participación “reutemista”, los dos alfiles del Lole, Jorge Obeid y Oscar Lamberto, se resisten a integrarse al elenco de gobierno. “Yo ya hablé de esto con Duhalde cuando formó el primer gabinete y él entendió mis razones”, tomó distancia Obeid, mientras que Lamberto expresó: “Yo trabajé junto a Remes y esa etapa está terminada”.
Reutemann fue tajante ante la pregunta de si asumiría la presidencia ante la hipotética remoción de Duhalde: “Yo de ninguna manera, además Duhalde tiene que seguir hasta el 2003”. A esa hora –media mañana– ni siquiera había recibido el llamado desde la Casa Rosada convocándolo a la reunión de Olivos. No obstante, el manejo de los tiempos del ex piloto de Fórmula Uno lo llevó a realizar una seguidilla de notas periodísticas con medios rosarinos en las que fijó posiciones que posteriormente discutió con sus colegas en Olivos.
“No somos vistos con simpatía en el exterior, es hora de que empecemos a cumplir los compromisos, porque si además aplaudimos cuando decimos que no vamos a pagar, estamos mal”, disparó Reutemann en alusión a la relación de la Argentina con el FMI.
Consultado acerca del Plan Bonex, el Lole también fue explícito: “Creo que era una tema que habría que haber estudiado bien, no me parece oportuno haber hecho un anuncio como el que se hizo”, destacó el gobernador, que lamentó “lo tardío de algunas medidas, porque se fueron desde el 2001 más de 20 mil millones de dólares, que si estuvieran otra sería la posición para negociar con el Fondo”.
Reutemann se reunió con Duhalde alrededor de la 18, antes del encuentro con la totalidad de los gobernadores peronistas. Allí –sostienen fuentes cercanas al mandatario– el gobernador se puso al tanto de los pasos que Duhalde daría en las próximas horas, pero fiel a su estilo se limitó a escuchar al Presidente sin condicionar su apoyo, dejando en claro que “desatender la negociación con el FMI sería aislarse del mundo”.
“Yo vi al Presidente con vocación para continuar”, resumió Reutemann su encuentro y reafirmó que “debe seguir hasta el 2003”, declaración que aplacó un tanto las tensiones cuando el fantasma del Chapadmalal de Adolfo Rodríguez Saá comenzaba a sobrevolar la residencia de Olivos.