EL PAíS
› PELEA BIELSA-CARRIO POR LA DIPLOMACIA
Con la Capital Federal como trasfondo
La candidata a diputada fustigó duramente la política exterior, las actitudes de Kirchner y la Cancillería argentina. Levantó una polvareda en el Palacio San Martín donde, entienden, detrás de sus críticas se esconde un tiro por elevación al canciller, que está segundo en las encuestas.
› Por Sergio Moreno
En la cancillería argentina han puesto su ojo sobre Elisa Carrió, habida cuenta de que Elisa Carrió descerrajó munición gruesa sobre la política exterior de Néstor Kirchner y de Rafael Bielsa. En una conferencia que dio en el Instituto del Servicio Exterior de la Nación, la líder del ARI le dijo al auditorio compuesto por diplomáticos y aspirantes a serlo, que eran “uno de los grupos más humillados de la Argentina”, “víctima de la omnipotencia de la ignorancia y de la vulgaridad extrema”. Paralelamente, la candidata a diputada disparó sus dardos sobre el Presidente, a guisa de la ausencia a la Cumbre de Cuzco, argumentando la carencia de una política exterior, el destrato que Kirchner les daba a sus pares, y el daño que ello perpetraba a la Argentina. En el edificio de Arenales y Esmeralda están convencidos de que Carrió “comenzó una batalla contra el canciller” Bielsa, a partir de que el jefe del Palacio San Martín, a pesar de no haber definido su candidatura a diputado nacional, “está segundo en las encuestas y creciendo”.
Acostumbrada a ejercer un alto perfil, Elisa Carrió fue impiadosa la semana pasada, respecto de la ausencia de Kirchner a la Cumbre de Cuzco, donde se dio nacimiento a la Comunidad Sudamericana de Naciones. El bordado de este nuevo espacio de integración regional fue realizado por el ex presidente Eduardo Duhalde, con el apoyo del brasileño Luiz Inácio Lula da Silva. Ante la ausencia de Kirchner en el meeting –su médico le había sugerido no participar en la altura cusqueña, según se informó oficialmente–, la jefa del ARI fustigó al patagónico: dijo que no haber ido a un evento que calificó como “histórico” dañaba al país; que su ausencia se debía a un enfrentamiento con Duhalde, por una puja de poder de cara al 2007, y que la cumbre fue capitalizada en términos de liderazgos regionales por Brasil.
Carrió había endurecido su discurso de opositora con la coartada que le brindaron otros faltazos presidenciales: a las cenas de recepción del presidente de Vietnam y de Corea, ambos visitantes del país hace quince días.
Los estrategos de Bielsa vieron varias aristas a este interés de Carrió en las relaciones exteriores. “A ella le sirve cualquier cosa para pegarle al Gobierno, pero ahora le tira por elevación a Rafael (Bielsa), porque podría ser su contrincante en las elecciones de 2005 en la ciudad (de Buenos Aires)”, contó a este diario uno de los consejeros del canciller. En el Palacio San Martín analizan lo que entienden es una estrategia de la candidata del ARI. Sostienen que la ex diputada ataca a Kirchner, sostiene que no existe política exterior y, de paso, ningunea al canciller. “Está claro que su blanco es siempre el gobierno nacional, y en este caso Bielsa: le sale redondo”, dijo la fuente mencionada anteriormente.
Los diplomáticos, un tanto fastidiados por las acusaciones de la chaqueña, enunciaron ante el cronista de este diario lo que denominaron “una política exterior presente y activa”. En la enumeración nombraron: “Solucionamos las crisis de Bolivia, ayudamos al fortalecimiento institucional de Venezuela, jugamos un papel en la reforma de la ONU, jugamos fuerte en la resolución del recambio de presidente en la OEA, fortalecimos los lazos con España, trabajamos con el G-7 para mejorar la posición relativa por la deuda externa; tenemos una pujanza jamás vista en comercio exterior; acabamos de llegar a un acuerdo importantísimo con Gran Bretaña por la pesca en la milla 201, sin beneficiar su posición en Malvinas y en el Atlántico Sur, a pesar de que no damos permisos para más vuelos a las islas; no firmamos acuerdos que pueden perjudicarnos, tales como con la UE y el Nafta, hasta tanto no encontremos una veta mejor, sin cerrar las negociaciones”. Lilita avanzó en sus críticas sobre los diplomáticos, actitud que puso en pie de guerra a varios diplomáticos de carrera, incluso a los que guardaban alguna simpatía hacia la aspirante a diputada por la ciudad. La semana pasada, en diálogo con Rolando Hanglin, por Radio Continental, descerrajó: “Brasil tiene una cancillería extraordinaria y ésa es la gran diferencia. La diferencia no es un presidente, la diferencia es una cancillería con gente preparada, acostumbrada, con negociadores externos... Todo se hace más seriamente, en Chile, incluso en Uruguay y en Brasil, y nosotros creemos que somos los más inteligentes, en realidad, somos los más guarangos y los más omnipotentes de América latina”. La parrafada circuló por los pasillos del Palacio San Martín. Los rostros de varios diplomáticos de carrera enverdecieron.
El propio Bielsa aprovechó la gaffe de Carrió para contragolpearla. En una reunión de funcionarios –entre los que había funcionarios políticos y de carrera–, el ministro reconoció que desconoce las posiciones de la diputada sobre temas centrales de política exterior, ya que nunca los ha expuesto, y la fustigó por cometer “errores de apreciación” y por su “desconocimiento”. “Tanto error de apreciación y de conocimiento y tanto olvido por las buenas maneras se deben a que Carrió no piensa tanto en la patria como en ser presidente. Para ella es lo mismo, ahí reside el problema. Quizás, ella se dé un respiro para pensar en las diferencias que existen entre construir ciudadanía y destruir sin sabiduría alguna”.