EL PAíS
› LIBERARAN A UN ASESINO DE CABEZAS
A un paso de la calle
Se trata de José Luis Auge. Es por la aplicación del dos por uno, tras haber cumplido nueve años de prisión. Norma Cabezas, madre de José Luis, dijo: “Los jueces son unos hijos de puta”.
› Por Raúl Kollmann
“Me quiero morir. Son unos hijos de puta todos los jueces. Hay un asesino en la calle.” Esta fue la frase con la que reaccionó Norma Cabezas, la madre de José Luis, tras conocer que le fue concedida la libertad condicional a uno de los ladrones del barrio platense de Los Hornos, José Luis Auge, quien participó del secuestro y asesinato del fotógrafo.
La Cámara de Casación había reducido la pena de Auge a 18 años de prisión, pero por aplicación de la llamada ley del dos por uno, al ladrón, que pasó siete años tras las rejas, se le computan como doce y con ello acumuló el equivalente a dos tercios de la condena. Su abogado pidió y obtuvo entonces la libertad condicional con una fianza de 20.000 pesos. En principio, el Tribunal Oral condenó a Auge a prisión perpetua, pero Casación argumentó que el integrante de la banda de Los Hornos estaba aquella noche borracho y drogado, por lo cual no salió del auto y no intervino directamente en la ejecución y posterior quema del cuerpo de Cabezas.
Quien tomó la decisión de liberar a Auge fue, curiosamente, el Tribunal Oral de Dolores, o sea los mismos jueces que lo condenaron a una pena mucho más dura. Los magistrados consideraron que se aplica la ley del dos por uno, aun cuando en el caso Cabezas todo el proceso judicial fue rápido y el juicio culminó, pese a la complejidad, tres años después de ocurrido el asesinato. Hace unos meses, cuando ya se hablaba de que Auge quedaría en libertad, el abogado de la familia Cabezas, Alejandro Vechi, y el entonces ministro de Justicia Gustavo Beliz, con el apoyo del presidente Néstor Kirchner, sostuvieron que no debía concederse la libertad justamente porque la ley del dos por uno apuntaba a los expedientes en los que existía un retardo de justicia, lo que no sucedió en el caso Cabezas, ya que hubo sentencia de un tribunal.
Auge fue apresado en 1997, y de acuerdo a la norma convalidada por los jueces de Dolores, los dos primeros años se consideran de trámite habitual de un juicio y se computan en forma simple. En cambio, a partir de 1999 se habla de retardo de justicia, pese a que hubo sentencia, porque siguieron las sucesivas apelaciones y la condena entonces no estaba –ni está todavía– firme. Desde 1999 transcurrieron cinco años, computados como dobles, es decir, diez. A ello se suman los dos primeros, lo que totaliza 12. Siendo la condena a 16 y habiéndose cumplido el equivalente a los dos tercios, los magistrados sostuvieron que correspondía la libertad condicional. El abogado de Auge, Juan Martín Cerolini, fue categórico: “La ley del dos por uno tendrá sus fallas, pero existe y está en vigencia. A Auge le corresponde la libertad”.
La banda
Auge, junto a otros ladrones del barrio de Los Hornos, Miguel Retana, ya fallecido, Horacio Braga y Gustavo González, fueron contactados por el oficial de la Bonaerense Gustavo Prellezo para participar del secuestro y asesinato de José Luis Cabezas. Los horneros, como se los llamó, fueron llevados a la Costa por el policía, alojados en un departamento que alquiló otro oficial de la Bonaerense y hubo un tercer uniformado que les mostró quién era Cabezas. Tras el secuestro, al fotógrafo le pegaron dos tiros en la nuca y luego quemaron el auto con el cuerpo adentro. De acuerdo con el fallo judicial, Alfredo Yabrán fue quien, de hecho, encargó la operación. Para el tribunal de Dolores todos tuvieron parecida responsabilidad y se los condenó a prisión perpetua, pero luego Casación sostuvo que Auge no tuvo tanta participación por su estado de ebriedad y el efecto de los estupefacientes. En abril pasado, Cerolini presentó un pedido de libertad condicional, pero los magistrados lo denegaron en base a un informe del Servicio Penitenciario. El texto señaló que Auge tenía buen comportamiento, se convirtió al evangelismo, pero que psicológicamente constituía un peligro. Ahora no se volvió a pedir informe de la Junta de Selección, que no sólo evalúa el comportamiento sino que proyecta la posible conducta del preso en libertad.
En diálogo con Radio Del Plata, la madre de Cabezas embistió: “Son unos sinvergüenzas. Ocho años venimos luchando, yendo a ver al Presidente, a uno y a otro, y todos nos abrieron las puertas, pero los jueces son una basura. Les rebajaron la condena, después lo liberaron por el dos por uno”, protestó ayer Norma Cabezas. “Desgraciadamente es así, acá no tenemos ley para nadie. Yo ya tengo catalogados a los jueces. Hasta que no se reforme la Constitución y hagan algo, esto va a seguir así. Siguen matando gente y a los 10 años los largan. Este (por Auge) tenía perpetua y antes de los ocho años ya está en la calle”, añadió su esposo, José.