Por Miguel Jorquera

La lista fue extensa. Veinticuatro diputados de todos los bloques partidarios de la Legislatura porteña pidieron la palabra para despedir con elogios a Vilma Ripoll. La legisladora de Izquierda Unida renunció a su banca para que Marcos Wollman, del Partido Comunista, termine el acotado mandato de dos años en el único escaño que esa alianza política obtuvo en la ciudad de Buenos Aires en las últimas elecciones. Como despedida, Ripoll, que volverá a su viejo empleo de enfermera en el Hospital Italiano, dejó marcada la impronta de su trabajo parlamentario en los últimos meses: la conformación del “interbloque de Izquierda” que reúne a ocho representantes de cinco agrupamientos políticos.
“Su esfuerzo militante, su honestidad, su compromiso con los desposeídos, y su dignidad para superar diferencias políticas para buscar soluciones sin renunciar a sus principios”, fueron los atributos más destacados en cada uno de los discursos con que legisladores de las más variadas tendencias políticas despidieron a Ripoll. Diputados del ibarrismo, del macrismo, de izquierda y de derecha elogiaron a la legisladora que más de una vez cuestionó sus posturas en pleno recinto de sesiones.
Aunque emocionada, Ripoll respondió a su estilo. Con un lenguaje sencillo reafirmó sus convicciones: “Mi renuncia es una señal de compromiso con la palabra empeñada en los acuerdos pactados. No me cuesta hacerlo porque no es una cuestión personal. Estoy al servicio de una tarea que hoy será aquí y mañana en otro lado”, señaló la ahora ex legisladora que fue aplaudida y saludada por todos los diputados, además de decenas de militantes de su partido (MST) presentes en la barra de la Legislatura.
“Si por alguna cuestión visitan el hospital, que no sea unidad coronaria, pregunten por mí que yo los voy a orientar”, les dijo Ripoll a los legisladores después de explicar que regresará a su trabajo de enfermera en el Hospital Italiano, aunque no será por mucho tiempo. Ripoll volverá a pedir licencia el año que viene para iniciar la campaña proselitista de Izquierda Unida en la provincia de Buenos Aires, donde encabezará la lista a diputados nacionales.
Ayer también ingresó formalmente a la presidencia de la Legislatura porteña la solicitud para conformar un “interbloque de izquierda”, en el que Ripoll trabajó fervientemente. El mismo quedará integrado por Beatriz Baltroc (Autonomía Popular); Héctor Bidonde, Daniel Betti y Sergio Molina (Bloque del Sur); Tomás y Rubén Devoto (Movimiento por un Pueblo Libre) y Susana Echegoyen (19 y 20 de Diciembre); al que “se sumará” el flamante legislador Marcos Wollman (Izquierda Unida) que anunciaría personalmente su incorporación al nuevo nucleamiento que nadie quiere llamar, por comparaciones históricas, “grupo de los ocho”.