EL PAíS
› REPORTAJE A JOSE MARIA DIAZ BANCALARI
“Cada vez que lo torearon, Duhalde salió a responder”
El presidente del PJ bonaerense está esperando una carta convocándolo a mediar y busca poner paños fríos al conflicto abierto en la provincia. Sin embargo, cuando debe tomar posición, Díaz Bancalari enseguida se alinea con Eduardo Duhalde y sostiene que no entiende la actitud de Felipe Solá.
› Por Eduardo Tagliaferro
Un grupo de legisladores enrolados en el denominado felipismo había adelantado que a través de una carta reclamaría al presidente del PJ de la provincia de Buenos Aires, el diputado José María Díaz Bancalari, sus oficios de mediador entre los duhaldistas y el gobernador bonaerense Felipe Solá. “Todavía no recibí ninguna correspondencia, pero le adelanto que estoy tratando de interceder entre unos y otros para superar esta situación que se ha dramatizado mucho”, confiesa Díaz Bancalari en diálogo con este diario. Le baja el tono al conflicto político. “No estamos en el apocalipsis, no hay conflicto institucional, no está en juego la gobernabilidad, ni la democracia, ni la unidad del peronismo bonaerense”, agrega. La interna peronista suele ser como las brujas: no existen, pero que las hay, las hay. Por ello, Díaz Bancalari no oculta su sorpresa, primero, por la decisión de Solá de lanzar una línea propia, por ahora claramente minoritaria y, después, por el veto al presupuesto votado por la Legislatura provincial.
–¿Cómo interpreta el veto de Solá al presupuesto votado por la Legislatura bonaerense?
–En verdad el tema se ha dramatizado mucho desde los medios y también con una puesta en escena que no tiene antecedentes. Estoy hablando de la presentación pública que se hizo del veto al presupuesto.
–¿Por qué lo dice?
–No es del todo feliz tener en vilo a la sociedad. El pueblo no quiere problemas, no quiere actitudes suicidas. Nos reclama a todos que trabajemos más. Sobre todo en una provincia que tiene una serie de conflictos muy importantes.
–¿No me va a negar que Solá reacciona a otra movida del duhaldismo en la Legislatura?
–Mire, esto no es el apocalipsis. No hay conflicto político, no está en juego la gobernabilidad, ni la democracia, ni la unidad del peronismo bonaerense. Le recuerdo que el presupuesto del 2005 llegó bastante fuera de término. Si los legisladores lo hubieran rechazado por ello y modificaban la Ley de Contabilidad de la provincia, entonces sí Solá se quedaba sin presupuesto. Además, tampoco he visto a mucha gente en la calle gritar la vida por el presupuesto 2005 de Solá.
–Los seguidores del gobernador dicen que se le negaron facultades que el peronismo le concedió al gobierno nacional.
–Pongamos las cosas en su real dimensión. De cincuenta y cinco artículos, solamente no le votaron tres. Se le aprobó un convenio con el BID por 350 millones de pesos para la realización de obras de infraestructura y también un acuerdo con el Ejecutivo Nacional por unos 1300 millones.
–¿Entonces cómo explica la reacción de Solá?
–Me gustaría entenderla.
–Algunos creen ver la mano del gobierno nacional detrás del gobernador.
–Aunque algunos hombres identificados con Solá han querido presentarlo así, le puedo asegurar que no hay nada de ello. El Presidente sabe que tiene en el peronismo bonaerense un aliado incondicional. Precisamente si algo nos han criticado, es ese acompañamiento incondicional. Quien necesita que sus actos parezcan tener el guiño de Kirchner es porque carece de sujeto propio en política.
–¿Qué hará entonces?
–En principio, mediar. Hay que actuar con moderación, con equilibrio. No se olvide que soy el presidente del partido. Estoy esperando una carta en la que se me pide precisamente eso, mediar. Todavía no la recibí. El peronismo bonaerense tiene una responsabilidad enorme. Responsabilidad que no se puede negar. Vamos a seguir expresando nuestro apoyo al presidente Kirchner y vamos a colaborar con el trabajo de gobernar la provincia. Es tiempo de gestión a fondo, es tiempo de hechos.
–También es tiempo de elecciones...
–Le recuerdo que hace poco, el 21 de noviembre pasado, nosotros tuvimos una interna partidaria. En ella todos nos encolumnamos con la consigna “Duhalde conducción”. Y subrayo lo de todos. En ese momento nadie dijo que Duhalde o el PJ de la provincia tenía actitudes feudales. (Nota de la Redacción: la referencia es al intendente de La Matanza, Alberto Balestrini, quien declaró: “Duhalde es un señor feudal”.) Luego, Solá dijo que en el PJ no se debate. Pero fue más tarde, luego de una interna en la que todos quedaron boquiabiertos por su limpieza. Además le recuerdo que estamos hablando del mismo partido que lo eligió a Solá como candidato en 1991 y como candidato a vice de Ruckauf y luego como candidato a gobernador. Hace cinco años que Solá gobierna en la provincia con el respaldo del partido. Dos años estuvo con Ruckauf como vice, dos como reemplazo y uno como gobernador electo. Y casi con la misma Legislatura. Por eso le digo que la puesta en escena excede el marco del enojo porque no se votaron algunas facultades. No hay antecedentes de que alguien haya vetado una ley con un acto público.
–Entonces volvemos a la interna de Solá con Duhalde.
–En el peronismo nunca tuvo éxito la presión mediática. Le repito que en noviembre todos estaban de acuerdo con la consigna “Duhalde conducción”. Ahora se empecinan en traerlo a Duhalde de vuelta al ruedo político cuando él repitió que se estaba retirando.
–Usted lo conoce a Duhalde. ¿Qué respuesta se puede esperar de él?
–Lo único que le puedo decir es que a Duhalde cada vez que lo torearon, no dudó en responder. Más ante algunos planteos incomprensibles. El partido que tanto critican es el que puso a muchos en el lugar que ocupan. Además, Duhalde no suele inmiscuirse en la política de gobierno. No pide nada. Por eso cerca de Duhalde todo el mundo está sorprendido.
–¿Se está discutiendo plata?
–Fue la Corte de la provincia la que dio por terminada la emergencia económica. Esto lo saben todos los legisladores. ¿En qué bloque estaban los que ahora denuncian supuestos manejos irregulares de fondos? Le digo que no conozco de qué montos están hablando, pero me resulta extraño que esto aparezca luego de que se lanzó la línea interna del gobernador. Jamás vi una situación de esta naturaleza.
–¿Entonces qué se está discutiendo?
–Me gustaría saberlo. Lo que sí está claro es que algunos legisladores se empeñan en presentar a los duhaldistas como una banda con manejos extraños y cosas por el estilo. Pero eso es parte de la actuación mediática, me parece. Tengo en claro que Kirchner protegerá la gobernabilidad de la provincia, cosa que no está en cuestión. Lo que está sometido a tironeo son algunas estructuras provinciales.