El ex juez federal Víctor Hermes Brusa y el ex comisario Héctor Colombini fueron detenidos ayer por el juez de Santa Fe Reinaldo Rodríguez. El arresto se efectuó como medida preventiva ya que los dos represores están citados a declarar hoy por los crímenes que cometieron durante la última dictadura militar.
Además de Brusa y Colombini, el juez Rodríguez citó para mañana a Eduardo Ramos y Nicolás Correa, y lo propio hizo para el lunes con María Eva Aebi y Juan Calixto Perizotti, todos investigados por violaciones a los derechos humanos. Estos cuatro acusados también tienen orden de arresto y podrían quedar detenidos en las próximas horas.
Rodríguez inició esta causa a partir de un pedido de extradición de los represores que había enviado el juez español Baltasar Garzón. En su momento se rechazó la solicitud pero se resolvió abrir una causa en el país. A raíz de este origen, el magistrado calificó los hechos como “genocidio”, la misma figura por la que está siendo juzgado en España el ex marino Adolfo Scilingo. Esta es la primera causa en la Argentina en la que los represores están imputados por ese delito. En el expediente ya constan las declaraciones de más de veinte víctimas.
A fines de diciembre del año pasado Rodríguez ordenó el reconocimiento de una vivienda que dos sobrevivientes señalaron como un ex centro clandestino de detención. Daniel García y su esposa, Alba Sánchez, fueron los encargados de reconocer la edificación ubicada en la localidad costera de San José del Rincón. Los denunciantes sufrieron amenazas que se incrementaron luego de esta medida. El mes pasado, uno de los hijos del matrimonio fue amenazado con un arma de fuego. La pareja de sobrevivientes hizo la correspondiente denuncia policial.
“No es la primera vez que sucede. Es común ver autos que pasan por casa con sus ocupantes señalando con el dedo. También nos dejaron cajas con cinta aisladora en la puerta, simulando la existencia de una bomba”, señaló García tras la amenaza.