El presidente Néstor Kirchner se comprometió ante la agrupación Familiares y Amigos de las Víctimas del atentado contra la AMIA a impulsar un proyecto de ley que establezca como imprescriptibles los crímenes del ataque contra la mutual judía. Los penalistas que asesoran a Familiares señalaron que el año próximo prescribirían los delitos relacionados con el atentado, lo que fue ratificado por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien fuera profesor de Derecho penal en la universidad. El texto de la ley de imprescriptibilidad será redactado por el Ejecutivo y enviado al Congreso en breve, pero se referiría en general a crímenes cometidos en el marco de actos terroristas.
Los integrantes de la agrupación Familiares estuvieron el jueves con Kirchner por más de dos horas. La delegación encabezada por Luis Czyzewsky y Sergio Burstein fue recibida por el primer mandatario junto al secretario general de la Presidente, Oscar Parrilli, y el ministro del Interior, Aníbal Fernández, aunque luego se sumó el jefe de Gabinete para tratar el pedido relacionado con la prescripción de los delitos del atentado. “Suponga –le dijeron los familiares a Kirchner– que a fines del año próximo aparezca una persona diciendo: ‘Yo fui el que organicé el atentado’. En ese caso no se lo podrá juzgar, porque pasados los 12 años del ataque los delitos ya prescribieron. Lo mismo sucede si la fiscalía especial, que ahora encabeza el fiscal Alberto Nisman, y trabaja en nuevas pistas, descubre a algún integrante del grupo terrorista. Esto debería remediarse con una ley.”
El diagnóstico sobre la prescripción tiene una consecuencia tácita: los crímenes del atentado de la Embajada de Israel quedaron impunes porque ya pasaron más de doce años del atentado, y aun si se presentara alguien confesando que incrustó el coche bomba en el edificio de la Embajada no podría ser juzgado. Se cerraría así un expediente en el cual, de hecho, nunca hubo un detenido, ni siquiera un sospechoso de haber colaborado con el atentado en territorio argentino.
El Ejecutivo estudiará los términos del proyecto de ley que abarcaría todos los homicidios producidos en el marco de actos terroristas. Tal vez el problema más delicado sea definir exactamente qué son actos terroristas, algo que ya generó muchísimas polémicas. Sin ir más lejos, cuando en tiempos de Fernando de la Rúa se pretendió dictar una ley antiterrorista.