EL PAíS
Un aumento record de la pobreza y la indigencia
La combinación de desempleo e inflación disparó como nunca los índices de pobreza, que crecen parejo en toda la región metropolitana. Los indigentes son más del doble en apenas 23 meses. La Capital, más rica, aun
así cuadruplicó.
Cuando a fin de mes el Indec anuncie los nuevos índices de pobreza, no tendrá buenas noticias para dar: según un estudio de la consultora Equis, dirigida por Artemio López, en abril se registraron fuertes aumentos en la indigencia y la pobreza en las zonas metropolitanas bonaerenses. Las razones son el aumento de la desocupación, que llega al 23 por ciento en algunas áreas, y la inflación de la canasta básica de alimentos, del 35,5.
El estudio determinó primero la línea de indigencia y de pobreza en cuanto a ingresos, y determinó cuánta gente cayó por debajo. En Capital y Gran Buenos Aires, son cinco millones de pobres –44,3 por ciento– y casi dos millones de indigente –17,8 por ciento–, lo que deja una minoría que pueda llamarse de baja clase media o superior.
El estudio muestra porcentajes y números absolutos de pobres e indigentes dispares de acuerdo a la zona: la Capital es la menos afectada, la zona del tercer cordón la de mayor número de pobres. Pero el aumento de la miseria es parejo: la Capital, San Isidro y Vicente López pasaron de un 4 a un 16 por ciento de pobres desde 1996. En mayo de 2000 se medía en la región un 29,8 de pobreza, en mayo de 2001 un 32,7, en octubre un 35,4 y ahora más de un 40. Esto significa 2500 nuevos pobres por día.
La indigencia, después de estabilizarse en el 7 por ciento por años, tuvo un fuerte pico y pasó del 7,5 en mayo del 2000 al 17,8 en abril de 2002, un incremento del 137 por ciento en dos años. Esto significa 1.625 nuevos indigentes por día, de los cuales 600 son niños.