El ministro del Interior, Jorge Matzkin, aseguró que “no existe predisposición política del gobierno nacional para molestar al gobernador”. El gobernador al que hizo referencia ayer Matzkin era el de Santa Fe, Carlos Reutemann, quien hasta hace poco era el favorito de la Rosada para llegar a la presidencia en el 2003 y que, en un par de días, cambió de vereda. El disparador fueron las denuncias cruzadas sobre manejos irregulares en la distribución de planes sociales en la provincia que terminaron enfrentando al Lole con la Rosada. El problema para el Gobierno es que necesita que esta semana Reutemann firme el acuerdo para reducir el déficit como reclama el FMI, pero el ex piloto se niega. Con todo, en Interior prometían el esperado autógrafo del Lole para los próximos días.
El jefe del gobierno español, José María Aznar, no pudo ser más claro en la reunión que mantuvo el sábado con el presidente Eduardo Duhalde en Madrid. Le dijo que para cualquier ayuda era indispensable que llegara a un acuerdo cuanto antes con el FMI y que para eso debía cumplir con todas las exigencias planteadas: ley de quiebras, de subversión económica y compromiso de ajuste con las provincias, sobre todo de las tres más grandes. Córdoba ya firmó, Buenos Aires todavía duda y Santa Fe, que ya preparaba la lapicera, se echó atrás por esta pelea política.
Reutemann se enojó porque el piquetero Luis D’Elía, en una visita a la Casa Rosada, lo acusó de distribución irregular de los planes sociales. Dado que D’Elía es bonaerense y que hizo la denuncia a metros del despacho presidencial, Reutemann vio enseguida una conspiración oficial para entorpecerle sus ambiciones de candidato. “Es evidente que desde afuera y desde adentro del peronismo se están instrumentando campañas en contra de Reutemann”, remarcó ayer el diputado santafesino Jorge Obeid, uno de los defensores públicos del gobernador.
“Algunos se están molestos porque ven que se está instalando como el candidato indiscutible del PJ”, agregó, hablando de Reutemann, poco afecto a los debates públicos. Obeid remarcó en lo sugestivo que resultó que D’Elía haya hecho sus denuncias justo después de reunirse con el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández.
Poco interesado en extender una polémica que le complica sus planes inmediatos, Matzkin salió a calmar los ánimos. Lo que trató de hacer fue evaporar la idea de una campaña contra Reutemann, aunque en Santa Fe mucho no le deben haber creído. “Reutemann es uno de los mejores gobernadores del país. Tiene su provincia bastante ordenada, no tiene un déficit incontrolable y administra bien dentro de sus posibilidades”, aclaró el ministro. E insistió en que no existe “ninguna predisposición” del Gobierno para entorpecer el camino del Lole. “Al contrario, los esfuerzos están hechos para que pueda mejorar cada día su administración”, sostuvo.
Desde que asumió en Interior, Martzkin se dedicó a recolectar las firmas reclamadas por el Fondo. Hasta ahora, el acuerdo bilateral por el que cada provincia debe comprometerse a reducir el déficit ese año y llegar a un balance en equilibrio el año que viene fue firmado por siete provincias: Salta, Santiago del Estero, La Pampa, Chubut, Río Negro, Misiones y Córdoba. Hoy, se sumará también la ciudad de Buenos Aires cuando, por la tarde, el jefe de gobierno, Aníbal Ibarra, concurra a la Rosada. En el ministerio sostenían que la lista seguiría esta semana con Neuquén, Tierra del Fuego y... Santa Fe.
La creencia del Gobierno es que en el ánimo de Reutemann va a prevalecer más su intención de mostrarse confiable ante los ojos de los organismos internacionales de crédito que el enojo que le puede haber provocado el comienzo de una interna con el duhaldismo. Sin embargo, el ministro de Hacienda santafesino, Juan Carlos Mercier, dijo que antes de la firma a la provincia le interesaría saber cuándo va a cobrar las sumas que les adeuda la Nación por la coparticipación. Algo de lo que Matzkin no acusó recibo:”Sabemos que estamos todos de acuerdo en llevar adelante un plan para encontrar la salida más rápida a la crisis”, insistió.