Finalmente, el jefe del gobierno porteño, Aníbal Ibarra, no firmó ayer el acuerdo de reducción del déficit con el Gobierno, tal como habían anunciado en la Casa Rosada. Ibarra prefirió esperar la llegada del presidente Eduardo Duhalde y del ministro de Economía, Roberto Lavagna, de viaje por Europa. Antes de poner la firma, el jefe de gobierno quiere un compromiso de la Rosada por los millones que le tienen que pagar.
El jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, y el ministro del Interior, Jorge Matzkin, fueron quienes anticiparon que ayer a la tarde Ibarra se sumaría a la media docena de gobernadores que ya firmaron el compromiso que exige el FMI. En el gobierno de la ciudad se sorprendieron por el apuro del Gobierno en hacer el anuncio que aún no está del todo cerrado.
Entre lo adeudado por coparticipación y lo que se comprometió a financiar, Ibarra considera que Economía debe pagarle unos 240 millones de pesos hasta fin de año. Por eso, quiere que Lavagna le asegure que esos fondos le van a llegar en el tiempo y forma convenidos.