La diputada Margarita Stolbizer reconoció anoche el triunfo de Raúl Alfonsín en la interna del radicalismo bonaerense, con lo que quedó destrabada la situación de indefinición que caracterizó la jornada, en la que ambos sectores se adjudicaron la victoria mientras que la junta electoral no ofrecía datos oficiales concluyentes. Con el triunfo, Alfonsín queda posicionado para cristalizar su aspiración de presidir la UCR por cuarta vez, aunque le costó más de lo esperado. Stolbizer celebró lo pareja que resultó la elección. “Para nosotros el resultado es de una clarísima paridad y está demostrado que interpretamos la demanda de renovación del propio afiliado radical”, sostuvo la diputada.
En un partido que se caracteriza por su afán de resolver diferencias en internas, la UCR viene acumulando experiencias conflictivas en el ítem. Los últimos comicios internos se caracterizaron por las definiciones postergadas y las denuncias de irregularidades. La interna bonaerense del domingo no fue la excepción.
El mismo domingo de los comicios, a poco del cierre, Stolbizer anunció su triunfo. Un par de horas después, Alfonsín aseguró una victoria “holgada” –habló del 60 al 40 por ciento– y dijo no entender por qué el otro sector no admitía la situación. Cerca de Stolbizer, para entonces, habían bajado el nivel de optimismo.
Sin embargo, la mañana de ayer encontró de nuevo a ambas líneas proclamando su triunfo. En un momento se mostraron cifras de siete secciones electorales que marcaban un estrecho triunfo de Stolbizer –unos 500 votos–, pero faltaba escrutar la tercera sección, justo la que el alfonsinismo proclamaba como su bastión.
Poco después apareció Stolbizer y terminó con la incertidumbre. De acuerdo con sus números, Alfonsín se imponía con 46.849 votos (52,75 por ciento) contra los 41.970 votos (47,25 por ciento) que obtenía ella. Los alfonsinistas, en tanto, seguían hablando de una diferencia mucho mayor –decían cosechar un 57 por ciento–, sustentado en las amplias victorias obtenidas en la primera y tercera secciones electorales.
“Luchamos contra un aparato manejado durante muchos años por Leopoldo Moreau y Federico Storani y por eso sentimos que esto es un buen logro”, explicó Stolbizer en su aparición. “A partir de ahora sentimos que surge algo nuevo y por eso nuestro aporte ha sido recuperar las expectativas para muchos radicales e independientes”, remarcó.
Pese al reconocimiento de la candidata, hasta anoche la junta electoral del radicalismo no daba una palabra definitiva y se esperaban para hoy los números oficiales.
Dado lo parejo de la elección, los tres lugares correspondientes a la mayoría para delegados al Comité Nacional los ocuparían Alfonsín y sus dos correligionarios de apellido radical: Guillermo Illia y Mario Yrigoyen. En tanto para Stolbizer quedaba el lugar correspondiente a la minoría. Ellos, junto a los 98 delegados restantes del interior del país, elegirán al próximo presidente del radicalismo y, junto a él, el perfil que tendrá el centenario partido con relación al gobierno nacional.
Alfonsín es partidario de una oposición dúctil, de mayor acercamiento o separación de acuerdo con las circunstancias. En ese sentido, es conocida la disposición del ex presidente al diálogo y a conseguir acuerdos. Por otro lado, desde hace tiempo mantiene una muy buena relación con el cacique bonaerense Eduardo Duhalde.
En cambio, Stolbizer contaba con el apoyo del actual presidente de la UCR, Angel Rozas, y de otros referentes como el senador independiente Rodolfo Terragno, que son partidarios de mantener una mayor distancia con la Casa Rosada y recuperar el perfil opositor para el radicalismo.
Junto con la elección de los delegados al Comité Nacional, el radicalismo bonaerense eligió a sus candidatos a senadores provinciales, a concejales y a consejeros escolares. Por si fuera poco, el domingo votarán de nuevo para elegir a sus candidatos nacionales: para los diputados habrá treslistas, una con Ricardo Alfonsín, otra con el storanista Pedro Azcoiti y la última con Francisco Ferro, de la línea de Stolbizer.