EL PAíS
› EL DIRECTORIO DEL CENTRAL DISCUTE HOY LA SUERTE DE BRANDA
Riesgo de corrida para un ex senador
Actual vice segundo del BCRA, Ricardo Branda fue procesado por las coimas en el Senado. El apoyo de Redrado quizá no le alcance.
› Por Claudio Zlotnik
El Banco Central es un hervidero. El procesamiento judicial a Ricardo Branda en el caso de las presuntas coimas en el Senado conmocionó al directorio de la autoridad monetaria. Branda es el vicepresidente segundo de la institución, el tercero en importancia dentro de la escala jerárquica y el único de los imputados por el juez federal Daniel Rafecas que aún ocupa un cargo público, un motivo para que los reflectores se hayan orientado hacia el ex senador. La reunión de directorio de esta mañana promete ser caliente: algunos de sus miembros reclamarían el desplazamiento del colega procesado.
Branda fue designado por el ex presidente Fernando de la Rúa y su pliego, aprobado por la Comisión de Acuerdos del Senado. Ocurrió en noviembre de 2001, a escasas semanas del estallido de la crisis. El entonces titular del Central Roque Maccarone lo llevó a la vicepresidencia segunda. Significa que el actual presidente, Martín Redrado, tiene la facultad para apartarlo de ese cargo jerárquico, pero no podría destituirlo como director del BCRA. Ese proceso debería correr por cuenta de una comisión especial de la Cámara alta y tendría que iniciarlo el propio presidente de la Nación a través de una acusación formal.
Al respecto, resulta interesante recordar que, hace casi cuatro años, Néstor Kirchner se opuso a la aprobación del pliego de Branda. Su mujer, Cristina Fernández, hizo pública esa posición durante el debate en la Cámara alta: “El Senado actual está muy desprestigiado y no puede tomar decisiones”, disparó la senadora. En noviembre de 2001, el escándalo por las coimas estaba al rojo vivo y encima restaba tan sólo un mes para que esos senadores que daban luz verde al ingreso de Branda al Central finalizaran sus mandatos. Tras la aprobación, Cristina Fernández denunció que ésta había sido producto del “toma y daca político entre el gobierno (de la Alianza) y el bloque peronista” en medio de la profunda crisis, con un De la Rúa necesitado del respaldo político del PJ.
Menemista primero, que luego viró al duhaldismo, la situación de Branda no escapa a la pelea entre Kirchner y el ex presidente y ex gobernador de la provincia de Buenos Aires. Por estas horas, seguramente buceará entre sus vastos contactos políticos para obtener respaldo y eludir la ofensiva en su contra. El problema que se le presenta a este formoseño de 55 años, senador durante nueve años (1992-2001), es que sus colegas de entonces quedaron muy apartados del poder.
No es la primera vez que Branda es procesado por el Poder Judicial. De hecho, fue alcanzado por el procesamiento dictado por el juez Rodolfo Canicoba Corral, junto a varios ex senadores y ex funcionarios, medida que fue anulada hace un año por la Cámara Federal. En febrero de aquel 2001, también había sido acusado por el juez federal Adolfo Bagnasco por “admitir dádiva”. Branda había aceptado un viaje gratis a Europa, ofrecido por el Colegio Público de Escribanos. Cinco meses más tarde, la Cámara Federal lo sobreseyó: los jueces dijeron que el entonces senador no había recibido dádivas “sino una mera invitación”. En el Central afirman que, justamente, el hecho de que haya sido procesado en dos oportunidades y luego beneficiado por sendas decisiones judiciales posteriores puede convertirse en el principal argumento de Branda para defenderse.
El Banco Central se caracteriza por su verticalismo. Fueron pocas las veces que el directorio votó en contra de la posición de su presidente. Desde Reconquista 266 definen que la relación entre Redrado y Branda “es muy cercana, muy buena”. Aunque es obvio que si el matrimonio Kirchner mantiene su mirada crítica hacia el ex senador, la balanza se inclinará hacia el otro lado. Hoy a las 10 cuando, como todos los jueves, se reúnan los directores, tal vez empiece a escribirse una nueva historia para Branda.