Por A. M.

Ayer comenzó en Jujuy el juicio oral contra un policía acusado del crimen del joven Luis Cuellar, ocurrido en Libertador General San Martín el 10 de octubre de 2003. Hubo una ruidosa manifestación de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) frente al tribunal para reclamar la nulidad del proceso. Según explicó a Página/12 la abogada Mariana Vargas, la investigación de los hechos que están siendo juzgados ahora “la hizo el mismo juez que ordenó la represión, y que se investigó a sí mismo”.
Vargas representa a Ana María Cuellar, madre del joven de 19 años que fue asesinado en una marcha que derivó en incidentes frente a la comisaría 39ª, que había sido convocada para protestar por la muerte de Cristian Ibáñez ocurrida allí pocos días antes. Si bien la letrada no es parte en el juicio, porque el anterior abogado de la familia no cumplió con el mandato de sus clientes de constituirse en el proceso penal, tiene esperanzas de que la Sala I de la Cámara en lo Penal de la provincia acepte anular el proceso que estaría “viciado de parcialidad”.
El 4 de octubre, Ibáñez, de 20 años, apareció muerto en la comisaría, y la policía afirmó que se había suicidado en una celda de esa dependencia, ahorcándose con el cordón de su bermuda. Sin embargo, los familiares afirmaron que el joven no tenía motivo para quitarse la vida y acusaron a la policía de haberlo matado. Seis días después hubo una marcha de repudio que derivó en una pueblada contra la comisaría. Cuando los manifestantes ya se estaban retirando, la policía comenzó a disparar y un balazo alcanzó a Cuellar, provocándole la muerte.
En el juicio que comenzó ayer, el único acusado por esos hechos es el policía José Antonio Alemán, que formaba parte del Cuerpo Especial de Operaciones Policiales y habría estado pertrechado con equipo antitumulto. Supuestamente, cuando Alemán se encontraba dispersando a los manifestantes en la esquina de avenida Presidente Perón y Constituyentes habría disparado con su arma reglamentaria, causándole la muerte a Cuellar. La abogada Vargas destacó que no está imputado ninguno de los uniformados que dieron las órdenes para reprimir, como tampoco el policía Orlando Suvia, a quien Cuellar llegó a mencionar como el que le habría disparado.