Sin necesidad de nombrarlo directamente, Cristina Fernández de Kirchner cargó ayer contra Mauricio Macri en una reunión que la candidata a senadora por el Frente para la Victoria compartió con empresarios, comerciantes e industriales en el distrito bonaerense de Ituzaingó. “Un joven empresario –recordó la senadora– que ahora es candidato a diputado en la Capital dijo que el Estado está ausente”, tras lo cual arremetió contra él afirmando que“parte del Estado se lo llevó él y algunos más, y por eso está ausente”. La referencia al candidato porteño por la coalición derechista que comparte con Ricardo López Murphy no fue casual en el encuentro empresarial, ni mucho menos en el oeste del conurbano. Mauricio era aun más joven y un ilustre desconocido cuando firmó en nombre de la empresa familiar, Socma, la adjudicación directa (sin licitación) del faraónico y escandaloso plan cloacal de Juan Carlos Rousselot, cuando el ex locutor manejaba los destinos de Morón, del que entonces Ituzaingó formaba parte. La costosa obra fue un fracaso, pero pasó a formar parte de la memoria colectiva de los habitantes de la zona. Cristina también defendió allí la política santacruceña en la repatriación de los fondos provinciales. “En un país donde nadie rinde cuentas de lo que robaron, el Presidente tuvo que rendir cuentas de lo que ahorró.”