El embajador argentino en París, Archibaldo Lanús, transmitió ayer personalmente a funcionarios de la Cancillería francesa la queja del gobierno argentino por las declaraciones del jefe de misión de Francia en Buenos Aires, Francis Lott, que acusó no está claro si al Gobierno o al presidente Néstor Kirchner de populista y sesentayochista, en referencia al Mayo Francés de 1968. Ahora, en la Casa Rosada y en el Palacio San Martín esperan que Francia responda por escrito a la queja argentina, acaso la semana entrante, para dar por terminado el “incidente”, como lo califican en la Cancillería criolla.
Lott emitió sus calificaciones en una cena, el martes pasado, en la embajada francesa. Tales decires aumentaron la tensión tras la decisión de la empresa francesa Suez, controlante de Aguas Argentinas, de tal sociedad. Ahora, gobierno argentino y empresa francesa pulsean por ver quién pagará el lucro cesante de dicha decisión.
“Archie” Lanús fue ayer al Quai d’Orsay y fue recibido por tres funcionarios del área de América latina, incluido quien lleva el “desk” Argentina. El embajador reiteró los términos de la nota que entregó anteayer a la noche y, según confiaron fuentes diplomáticas a Página/12, tuvo buena recepción a sus reclamos. Ahora el Gobierno espera una respuesta escrita de Francia diciendo que lamentan el episodio para dar por terminada esta historia.
El texto de la embajada argentina en Francia que presentó Lanús expresó lo siguiente: “La embajada argentina quiere expresar el profundo disgusto del gobierno argentino por las expresiones del embajador francés en Argentina al considerarlas desafortunadas y apartadas de la realidad. Los dichos del jefe de misión de Francia en Buenos Aires en nada se condicen con las excelentes relaciones bilaterales entre dos países amigos, como quedó de manifiesto en las reuniones mantenidas entre Néstor Kirchner y Jacques Chirac en los últimos dos años”.
“La impresión es que (en la Cancillería francesa) no bancan demasiado a Lott. Pero eso no es asunto nuestro”, especuló ante este diario la fuente mencionada anteriormente. Lott fue embajador de Francia en Costa de Marfil y Liberia entre 1998 y 2001. Por su función, ejerció el cargo de jefe de las fuerzas armadas francesas en las ex colonias, especialmente en Costa de Marfil, donde se ganó fama de duro por sus innumerables represiones a la población local.
Amén de las características del embajador, el gobierno argentino decidió ayer dejar correr el agua y bajar la intensidad del conflicto.
El canciller, Rafael Bielsa, aseguró que, tras las “desafortunadas declaraciones de Lott, Argentina tuvo una reacción sumamente profesional” e hizo “lo que mandan los manuales”, que fue citar al diplomático y remitir una queja formal a la Cancillería francesa.
El gobierno francés, por su parte, confirmó la recepción de la protesta argentina. “Puedo confirmarles que en efecto recibimos una carta de las autoridades argentinas y que por supuesto la responderemos”, dijo ayer a los periodistas en París el vocero oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia, Jean Baptiste Mattei. Mattei destacó que el entredicho había sido resuelto el jueves en una reunión en la Cancillería argentina a la que fue convocado Lott. “Esa fue ocasión de ofrecer un cierto número de explicaciones”, subrayó.
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, circunscribió el entredicho a un “un incidente sólo con un funcionario de ese gobierno que representa al Estado francés”. “Creo que fueron claramente desafortunadas las expresiones del canciller”, sostuvo Fernández en declaraciones a una radio porteña. Bielsa, en tanto, justificó la actitud del gobierno nacional: “La de Argentina no fue una reacción destemplada, ni una reacción hormonal, sino una reacción sumamente profesional: hicimos lo que mandan los manuales”, aseveró. “El embajador de Francia es Francia en Argentina, precisamente por eso tiene que tener muchísimo cuidado con sus expresiones; hay países que han perdido centenares de miles de kilómetros cuadrados de territorio por una expresión desafortunada de su canciller”, reflexionó Bielsa.