EL PAíS
› CRISTINA DE KIRCHNER CERRO ANTE UNA MULTITUD EN EL MERCADO CENTRAL
“Este es otro modelo de país”
Amplia favorita en las encuestas, la senadora cerró su campaña en el Mercado Central. Anunció que el desempleo bajará en septiembre al 10,3 por ciento. El Presidente siguió el acto desde el palco.
› Por Diego Schurman
Con el anuncio de un nuevo descenso de la tasa de desocupación, Cristina de Kirchner cerró ayer una campaña marcada a fuego en su último tramo por los logros de la gestión del Gobierno. La senadora adelantó que en septiembre el desempleo se redujo al 10,3 por ciento, lo que coloca al país a un tris de llegar al tan buscado dígito. “Estos no son números: es otro modelo de país. Es el modelo de trabajo, exportación, producción y consumo”, resaltó la candidata del Frente para la Victoria.
El broche de la campaña proselitista tuvo como escenario al Mercado Central, en pleno corazón de La Matanza. Todo un símbolo teniendo en cuenta que se trata de un lugar de trabajo en donde el primer candidato a diputado, Alberto Balestrini, jugó de local por su condición de intendente.
“Patria, trabajo, la Chiche al carajo”, gritaba la colorida multitud ante la retahíla de Cristina sobre lo que “él” –como llamó a Néstor Kirchner, señalándolo en cada ocasión– hizo desde la Casa Rosada: “Baja de la mortalidad infantil, aumento de jubilaciones y salarios, incremento de las exportaciones”.
Su semblante cambió cuando recordó que el Presidente, sentado a un costado junto al gobernador Felipe Solá, le dijo “con una sonrisa en la boca” que del 11,3 del último trimestre la desocupación pasó al 10,3 por ciento en septiembre. “Estamos a 4 centésimos del dígito, pero se puede considerar que es el índice más bajo de los últimos 15 años.”
Blusa cruzada, saco y pantalón crêpe de seda, Cristina saltó al escenario con Mira a tu alrededor, el hit de Alejandro Lerner que utilizó a lo largo de la campaña, y se despidió con fuegos artificiales y una lluvia de papelitos. Este último detalle de corte americano la deleita.
Hubo espacio para Eva y Juan Perón, apellidos e imágenes que hasta ahora habían explotado casi con exclusividad los duhaldistas. La candidata favorita en todas las encuestas incluyó a los iconos del PJ en su discurso y Balestrini llamó a votar “silbando” la Marcha Peronista. El intendente de La Matanza ya comenzó a imaginarse presidente de la Cámara de Diputados y por eso, en su afán de unificar al peronismo, ya invitó al duhaldismo al diálogo.
El playón del Mercado estaba totalmente ocupado. Balestrini estimó unas “60 mil almas”. En cambio, el secretario de Medios, Enrique “Pepe” Albistur, estiró hasta “100 mil”. Anoticiado de la diferencia, abundó, sonriente: “Sí, 60 mil son matanceros, pero en total hubo 100 mil”.
Balestrini hizo recordar a los más viejos la propaganda de las vajillas Durax. Fue cuando dijo que, por su “gesta” de gobierno, el “Flaco” Kirchner “no es un pingüino sino un león”. Y ofreció entonces, emulando a Cristina, un muestrario de los “logros” de la gestión: desde la creación de trabajo –el tema, sin duda, omnipresente en cada discurso K– hasta la construcción de viviendas, pasando por la postura del Presidente ante el Fondo. “La nueva política es que el Presidente no sea un empleado del FMI”, remató, a tono con un spot que, por dos pantallas gigantes, refrescaron en la apertura la quita de 67 mil millones de deuda.
Para los Duhalde, amén de los recurrentes cánticos de la multitud, hubo un párrafo. “Devastaron la provincia. Y ahora dicen que van a hacer lo que no hicieron durante años”, dijo Cristina. Poco, y casi naïf, si se tiene en cuenta que en el lanzamiento, el 7 de julio pasado en el Teatro Argentino de La Plata, había equiparado al ex presidente con El Padrino de Francis Ford Coppola.
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