Alejado de los cierres partidarios masivos y hasta de las caminatas proselitistas, Luis Zamora cerró su campaña electoral ayer al mediodía con una conferencia de prensa en su local partidario de Villa Crespo. Aunque calmo, no dudó en cuestionar la “tónica de denuncia, difamación y desestabilización que se extendió a todos los candidatos” que tuvo la campaña y responsabilizó a “sectores de izquierda y del Gobierno” que “están detrás de las denuncias de (el actor Héctor) Bidonde”, quien lo acusó de “destruir deliberadamente” el proyecto político partidario.
Zamora también arremetió contra los dirigentes que “pasaron todos los límites morales” para asegurarse el voto de un electorado “distante”. También alertó sobre un aumento del voto en blanco e impugnado fundado en “la indiferencia crítica” de la población. Sin embargo, el candidato de Autodeterminación y Libertad dijo no tener la certeza de poder renovar su banca de diputado. Lo acompañaban su esposa y también candidata a diputada nacional, Noemí Oliveto, y quienes integran la lista a legisladores porteños. Oliveto, blanco de la críticas de quienes se fueron de AyL, no descartó “el robo de boletas” en el cuarto oscuro y criticó a sectores de izquierda que “sólo intentan obtener planes sociales”.