Los ladrones entraron en la madrugada y se llevaron seis computadoras y el fax. Dejaron varias puertas interiores rotas y dos armarios forzados, pero ninguna huella digital. Ocurrió ayer en el Servicio de Paz y Justicia, cuyo titular, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, no descartó que el robo haya estado vinculado a su participación en la Cumbre de los Pueblos que se realizó en Mar del Plata.
“No tenemos elementos para evaluar con certeza lo que ocurrió, pero algunas cosas me extrañan. Esto no parece ser algo de simples rateros, porque trabajaron con guantes e hicieron muchos destrozos. Arrancaron los cables y forzaron el mueble donde estaba la central telefónica, por ejemplo, pero no se la llevaron. A lo que se dedicaron fue a las computadoras”, dijo Pérez Esquivel a Página/12.
En las máquinas había material del centro de documentación y de las áreas que trabaja sobre la situación carcelaria, derechos humanos y menores en situación de riesgo.
Un dato llamativo es que los ladrones entraron en la sede sin romper la puerta de calle. Una vez adentro, desconectaron el sistema eléctrico para que no sonara la alarma y usaron velas. La impresión de la gente del Serpaj es que pasaron un buen tiempo en el interior de la casa, una antigua edificación ubicada en Piedras al 700, en el barrio de Montserrat. Los desconocidos realizaron en el primer piso, donde está el despacho de Pérez Esquivel y las oficinas de los equipos de trabajo, los mayores daños: con una palanca despegaron de la pared el marco de una puerta, rompieron otra y forzaron dos armarios. En cambio, no tocaron la administración.
El titular del Serpaj se comunicó con el ministro del Interior, Aníbal Fernández, quien le expresó su “preocupación” por el hecho. La policía técnica estuvo en el lugar buscando rastros, sin suerte. No hay testigos que se hayan presentado a declarar ante los investigadores, aunque sí hay versiones de vecinos que habrían visto sacar las computadoras en dos taxis.
Pérez Esquivel había tenido, la semana pasada, una alta presencia en los medios, ya que fue una de las figuras impulsoras del encuentro de organizaciones sociales y sindicales que sesionó en Mar del Plata en contrapunto con la IV Cumbre de las Américas. El robo ocurrió a cuatro días del cierre de ese evento. El titular del Serpaj señaló que no habían tenido amenazas durante los días anteriores y señaló que como todavía no tienen un panorama completo de todo lo que les falta, no saben cuánto del material podrán reconstruir. La denuncia por el asalto quedó radicada en la comisaría segunda de San Telmo.