¿Cómo puede ser que Néstor Kirchner haya aparecido ayer en televisión por toda Venezuela, si está recluido en su casa de El Calafate? Pero sí: apareció en las pantallas de la cadena estatal y por el programa con más rating del país, Aló Presidente. Y no sólo Kirchner. También George Bush y Luiz Inácio Lula Da Silva, más los presidentes de Canadá, Trinidad Tobago y México. Eran imágenes de la Cumbre de las Américas que se hizo en Mar del Plata. Escenas que no habían sido vistas hasta ahora, de la negociación a puertas cerradas de los jefes de Estado. No habían sido mostradas por televisión. Ni los periodistas que cubrieron la Cumbre habían podido verlas en vivo. El responsable de que salieran al aire fue nada menos que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
Acostumbrado a dar sorpresas, Chávez comenzó la edición 239 de Aló Presidente, su programa ómnibus que dura varias horas y transmite desde el Palacio de Miraflores, con un dato inesperado. Al menos para la prensa extranjera. Dijo que, tal como había prometido, iba a divulgar videos de la Cumbre de las Américas. También de la Cumbre de los Pueblos. Y reconoció que era posible que la proyección generara malestar en otros mandatarios, pero que su deber era “con el pueblo venezolano”. “Voy a citar a José Gervasio Artigas: con la verdad, ni ofendo ni temo. Si esta tarde comienzan a salir comunicados por ahí de los gobiernos y las cancillerías, bueno, lo lamento. Pero este material tiene que conocerlo el mundo”, aseguró.
Tras esa aclaración, por las pantallas aparecieron momentos de la Cumbre de los Pueblos, que cerró en el Estadio Mundialista. Pero el plato fuerte vino después. Convertido en un presentador televisivo, Chávez adelantó que pondría al aire videos de los discursos en el encuentro privado de presidentes del 5 de noviembre. Aclaró que las escenas estaban editadas y dijo que no había conseguido imágenes del viernes 4. Entonces comenzaron a aparecer. Lo primero que se vio fue a Kirchner en su discurso de apertura. Fuera de pantalla, Chávez hacía acotaciones. “Disparó primero y el que pega primero pega dos veces. El (por Kirchner) nos representó a nosotros en ese discurso, tremendo discurso. ¡Ay, caballeros! Si le hubieran visto la cara al míster (por Bush), yo sí gocé”, confesó.
Mientras por la pantalla se veía a Kirchner, Chávez pidió a los televidentes que se fijaran en los rostros de los demás jefes de Estado que eran enfocados por las cámaras. Incluso hizo repetir secuencias para que se vieran mejor los gestos. El programa siguió con el discurso del mandatario de Canadá, Paul Martin, uno de los oradores que defendió el ALCA. En el fragmento que se vio por televisión, el canadiense replicaba el argumento de Kirchner de que el Mercosur más Venezuela representan el 75 por ciento del PBI de Sudamérica. “El tamaño de un país no significa que sus opiniones pesen más”, fueron las palabras de Martin.
Pero el mayor impacto lo logró cuando se vio al propio Bush en la charla a puertas cerradas en el salón Versalles del Hotel Hermitage. En esa secuencia, Bush pedía en inglés que se aprobara la propuesta a favor del ALCA que había presentado el vicepresidente de Panamá. “Creo que la sugerencia de Panamá debería ser aprobada. Si esa voluntad alrededor de la mesa no está reflejada alrededor de un documento, es fácil para muchos de nosotros presuponer que este cuerpo no quiere avanzar con el acuerdo de libre comercio de las Américas. Es claro que la sugerencia de Panamá es por lejos la voluntad del pueblo”, fueron las palabras del estadounidense.
Para los argentinos hubo otra sorpresa. En nombre del Mercosur, se lo vio a Kirchner advirtiendo que si se insistía con el ALCA podía no llegarse a un acuerdo. “Lo importante es tratar de viabilizar la salida del documento. Tirar más es arriesgarnos a que no tengamos un documento”, dijo. “No forzar salidas que dejen un sabor amargo”, agregó. También se lo mostró saliendo al cruce del mexicano Vicente Fox. “Mi pensamiento es absolutamente diferente al del presidente de México porque me parece queno fue la convocatoria de la Cumbre lo que está pidiendo el señor presidente. Con todo respeto”, se le escuchó decir a Kirchner.
Las secuencias de los videos fueron reproducidas por la agencia de noticias francesa AFP. Desde Caracas, el ministro de Información y Comunicación de Venezuela, Yuri Pimentel, contó a Página/12 que el gobierno venezolano les había pedido las imágenes “a las autoridades encargadas de la Cumbre”. “No era una cuestión privada. Estaban los representantes de los pueblos del mundo. Esas cosas deben ser públicas”, argumentó Pimentel.