“Resistir no es delito.” Si las voces que entonan una consigna son señal de su permanencia, ayer en la Plaza de Mayo no quedaron dudas. Un centenar de organizaciones de derechos humanos, agrupaciones sociales y asociaciones sindicales se mezclaron en ese único canto para acompañar la 25ª Marcha de la Resistencia. La movilización finalizará hoy, cuando se esparzan las cenizas de la fundadora de las Madres, Azucena Villaflor de De Vincenti, cuyo cuerpo fue identificado recientemente por el Equipo Argentino de Antropología Forense. Para terminar de acordar los detalles de la ceremonia, el presidente Néstor Kirchner recibió a los organismos, que aprovecharon la ocasión para ratificar el compromiso del Gobierno para que se esclarezcan las causas abiertas por violación a los derechos humanos.
La marcha arrancó desde la sede de Madres Línea Fundadora, con varias agrupaciones llevando la tradicional bandera con las fotos de los desaparecidos. A unos metros, Rosalía, con sus cinco años, luchaba con el retazo de tela con el mensaje de “Humildad y Paz”, que pintaron los chicos de la Casita Augusto Comte de la Villa 21. “Las Madres son nuestras madrinas. Nosotros las acompañamos todos los años porque consideramos que tiene que haber memoria y justicia para todos”, explicó a su lado la titular del Hogar, Adriana Molinuevo. Cuando llegaron a la Plaza, un fuerte aplauso los recibió. “Para saber acerca de los 30 mil desaparecidos, primero tenemos que ser capaces de reconocer lo que acá pasó. Esta es una lucha que depende de nosotros”, leyó una voz acompañada por los bombos de la Murga Derechos Torcidos, que no se dejaba desafiar por el calor que comenzaba a sentirse ya entrada la tarde.
Como todos los años, la jornada incluyó varias actividades. Al pie de la Pirámide se colocó una muestra de Acción Fotográfica y el trabajo realizado por un grupo de investigadores sociales sobre el Operativo Independencia. Junto a ellos, la Asociación de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas armó una galería con fotos, artículos de diarios y otros testimonios que lograron concentrar la atención de algunos extranjeros que pasaban por allí e incluso de algunos chicos que no dudaron en sacar sus cuadernos para tomar notas. Cuando la plaza comenzó a llenarse, la socióloga Alcira Argumedo fue la primera en tomar el micrófono para dar una charla sobre los movimientos revolucionarios en la década del 70. Le siguió una proyección sobre el Juicio a las Juntas.
Esta vez, el título de la jornada fue “Lucharon por la liberación. Levantemos sus banderas para seguir resistiendo”. Sin embargo, las consignas no se detuvieron en la reivindicación de la memoria. “Lo que hoy nos convoca es una serie de temas. Pedimos que se abran los archivos para saber qué pasó con nuestros hijos y rechazamos que los represores detenidos reciban trato preferencial. Pero tampoco podemos desconocer lo que pasa alrededor nuestro. Es urgente que se redistribuya la riqueza y que no se pague la deuda en detrimento de los pobres. El Gobierno debe saber nuestro rechazo a estas políticas, porque ésa era la lucha de nuestros hijos”, intentó resumir Nora Cortiñas, de Línea Fundadora.
Al igual que en las otras ediciones, muchos instalaron sus carpas en la Plaza para pasar la noche. El acto de hoy estará marcado por un cierre singular, en el que se esparcirán las cenizas de Azucena Villaflor. El cuerpo de la fundadora de las Madres fue identificado hace unos meses, junto con el de la monja francesa Léonie Duquet y los de otras tres Madres: Esther Ballestrino, María Ponce y Angela Auad. Todas fueron secuestradas entre el 8 y 10 de diciembre de 1977, entregadas por Alfredo Astiz, que había logrado infiltrarse en el grupo como familiar de un desaparecido.
La decisión de esparcir las cenizas en la Plaza estuvo a cargo de su hija. En la ceremonia, que incluirá la colocación de una placa, participará el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde. Para ultimar los detalles del acto, Néstor Kirchner recibió ayer a los representantes de los organismos. En el encuentro, que se extendió durante casi dos horas, algunos aprovecharon para reiterar el pedido al Gobierno para que asuma un mayor compromiso en el avance de las causas abiertas por los delitos contra los derechos humanos. En este sentido, Mabel Gutiérrez, de Familiares, expresó: “El Estado sigue ausente”. El disparo fue seguido por un gesto del Presidente, que encargó a la cartera de Duhalde que impulse la recuperación de todos los archivos con datos de los desaparecidos.

Informe: Carolina Keve.