No pudo con los diputados, pero piensa seguir peleando en la Justicia. El diputado electo Luis Abelardo Patti, acusado de graves crímenes de lesa humanidad, aseguró que intentará revertir la decisión que adoptó el martes la Cámara de Diputados cuando decidió no tomarle juramento e impedir así que acceda a su banca. “Primero iré a la comisión (de Peticiones, Poderes y Reglamento) para que estudie el diploma y después sí, creo en la Justicia y creo en la Corte Suprema”, dijo en declaraciones radiales. De todos modos, tendrá que armarse de paciencia porque esa comisión de la Cámara baja recién se conformará con sus nuevos miembros en marzo, con el inicio de las sesiones ordinarias.
La actual conformación, con la presidencia de la kirchnerista Roxana Bertone, cesa sus actividades mañana y recién el año próximo será reemplazada. Aunque ese escenario aparece lejano, una alta fuente del kirchnerismo en Diputados consultada sobre qué puede ocurrir en la comisión opinó ante Página/12 que “Patti no debe asumir nunca”. Mientras tanto, el ex subcomisario prepara los escritos para presentar en la Justicia para que sea ese poder del Estado el que se expida sobre su situación y se queja en los medios.
“Que en la casa de los representantes del pueblo se desconozca la voluntad popular es una gran cachetada a la Constitución nacional y a la democracia”, señaló en una entrevista por radio. Además, Patti aseguró que “no” se va a “morir” si no asume como legislador nacional, pero resaltó que lo votaron “500 mil personas”, por lo que “la obligación de los representantes del pueblo es respetar la voluntad popular”. También cuestionó la postura de los diputados que ayer bloquearon su jura al afirmar que “no les importó la legalidad, ni la democracia, ni la Constitución” al momento de votar. Y se lamentó de la posición que adoptaron los legisladores de derecha por adherir a la impugnación presentada por el diputado por Convergencia Miguel Bonasso. “Me extrañó que la derecha se ‘borocotizara’”, dijo en referencia al diputado electo por PRO Eduardo Lorenzo Borocotó, quien pasó del macrismo al oficialismo. El ex intendente de Escobar cree que fue “víctima de una maniobra del oficialismo” para que el ruido generado por su impugnación tapara la situación del polémico Borocotó.
Ayer algunos miembros de su partido, el Paufe (Partido Unidad Federalista), insistían en que “cualquier presentación que quisieran hacer tenían que haberla planteado antes de las elecciones”. Consultado por este diario, uno de sus allegados enfatizó que “fue intendente de Escobar en dos oportunidades y nadie lo impugnó para ejercer la función pública”. Además, aun ante la evidencia de que las causas en su contra están en pleno trámite, tal como pudo comprobar este diario, siguen afirmando que “las sentencias lo han dado por inocente”. Pero más allá de eso, el argumento que están invocando ahora son las “voluntades que lo votaron por derecha” y que tienen que respetar. Por ese motivo precisaron que “va a apelar a la Justicia porque sabe que jurídicamente ha respetado la Constitución”.
En el recinto, los únicos que habían defendido al ex subcomisario fueron el pattista Juan Carlos Bonacorsi y el duhaldista Jorge Landau. Bonacorsi se permitió citar a Juan Perón, a quien atribuyó la frase “el pueblo acierta aun en el error”.